Crimen sollicitationis
Y ante otro nuevo caso de pederastia me obligo a preguntarme por qué se da con esta frecuencia estos casos en la Iglesia… ¿Los pederastas se hacen curas o los curas se hacen pederastas?
Y ante otro nuevo caso de pederastia me obligo a preguntarme por qué se da con esta frecuencia estos casos en la Iglesia… ¿Los pederastas se hacen curas o los curas se hacen pederastas?
El juez Antonio Moreno Marín formula cargos contra 10 sacerdotes católicos por abuso sexual de menores sintetizando en apenas cinco folios la cruda realidad que sufrió este joven monaguillo, cuyo caso llegó a oídos del Papa quién incluso llegó a llamar al joven para pedirle disculpas. El auto de levantamiento del secreto del sumario sobre el llamado caso Romanones incluye un relato de hechos imputados que repasa tres años de abusos perpetradas por el sacerdote Román Martínez, y supuestamente consentidas por otros nueve sacerdotes y dos laicos.
El joven denunciante, que ahora tiene 24 cuenta cómo todo comenzó en 2004, cuando tenía 14 años y el párroco, Román Martínez, le invitó a la casa parroquial «dormir y a ver alguna película y como comenzó a obligarlo a realizarle masturbaciones y a intentar penetrarlo analmente. Varios testigos relatan episodios parecidos, todos igual de crudos. Y ante otro nuevo caso de pederastia me obligo a preguntarme por qué se da con esta frecuencia estos casos en la Iglesia y si es culpa del celibato al que se les somete obligándolos a renunciar a una sexualidad normal o es a la inversa y es que los pederastas se meten a curas. ¿Los pederastas se hacen curas o los curas se hacen pederastas?
Y para más leña al caso resulta que el juez da un plazo de 10 días a las partes para que se pronuncien sobre si los delitos pueden estar prescritos, debido a los años transcurridos desde que ocurrieron los hechos hasta que se interpuso la denuncia. Porque la justicia si es lenta no es justicia.