Vuelva Sr. García
Recuerdo con gracia las ácidas críticas del llamado “butanito”, es decir, Jose María García al estamento deportivo español en su época dorada como periodista deportivo.
Recuerdo con gracia las ácidas críticas del llamado “butanito”, es decir, Jose María García al estamento deportivo español en su época dorada como periodista deportivo.
“Pablo,Pablito, pablete” está más que deseoso de entrar en el Gobierno de España, para servirse a sí mismo y convertirse en un “chupotero” más del estamento de la política española, y lo lleva con ese “trote cochinero” insistente para poder llegar a “beberse hasta el agua de los floreros”, como han hecho hasta la fecha sus compañeros de profesión, es decir, la casta.
Pedro, que lucha contra los “caducos y trasnochados” barones y la vieja guardia, y los “tribuletes del pesebre” para mantenerse a toda costa, primero como como líder de un partido que parece carecer de “contenido y de continente” y, segundo para aspirar a la Presidencia del Gobierno. No lo tiene fácil Pedro, porque con su frentismo permanente y sus ideas de pactos podemistas, tiene ocurrencias, que no se le “ocurren ni al que asó la manteca”, como el de enfrentar a las bases frente al comité federal.
Al pobre Mariano, después del esfuerzo de sacar el país adelante, se olvida del partido y “monta un circo y le crecen los enanos”. Un partido popular, lleno de “meapilas”, “soplagaitas” y cuya renovación ha pasado por una serie de personajes «caducos y trasnochados», tal y como ha quedado demostrado en la composición de la mesa del Congreso de los Diputados.
Vuelva Sr. García, así nos ayudará a los españoles a divertirnos con esta casta política llena de lleno de “estómagos agradecidos, lametraserillos y abrazafarolas», «correveidiles».