Texas - Infancia Libre - Meritocracia
«El indulto muestra que la ideología está por encima de los derechos del niño y, por supuesto, de los derechos del padre»
La expresidenta de Infancia Libre, María Sevilla (izquierda). | Europa Press
Texas
En las navidades de 2018 estuve en Texas visitando a mi amigo Seth Wolitz, profesor emérito de la Universidad de Texas en Austin. Es una de las universidades públicas más prestigiosas del país, además de ser, junto al Capitolio y la calle Seis, visita obligada para cualquiera que aterrice en la capital de Texas. No recuerdo si la visitamos antes o después de nuestra cena de fin de año en un restaurante chino, pero recuerdo que hacía frío. El campus estaba vacío y triste sin el color de los estudiantes, pero los edificios lucían imponentes en la bruma de la mañana. A los pies del edificio principal, conocido coloquialmente como «La Torre» (94 metros de altura y un emblema de la ciudad) Seth me contó que en 1966, un tal Charles Whitman subió al último piso con un rifle y comenzó a disparar indiscriminadamente. Asesinó a 14 personas e hirió a más de treinta. Ante la gravedad de los hechos, la universidad tomó la tajante decisión de prohibir que nadie subiera a la torre.
Infancia libre
El Gobierno de España ha indultado a María Sevilla, presidenta de una asociación llamada Infancia Libre especializada en condenas por sustracción de menores con perspectiva de género. Sevilla, que se hizo evangelista gracias a un acupuntor, está condenada a dos años y medio de prisión y cuatro de pérdida de la patria potestad por haber separado a su hijo del padre durante dos años. En ese tiempo, el niño estuvo encerrado en una casa de la que solo podía salir noventa minutos al día para evitar ser descubierto. El niño, que ahora tiene once años, no estuvo escolarizado y su madre le inculcó una fe particular: cuando intervino la policía, el niño repetía que su padre era el diablo. El indulto muestra que la ideología está por encima de los derechos del niño y, por supuesto, de los derechos del padre; el indulto hace al Gobierno partícipe del maltrato de ambos.
Meritocracia
Un grupo de científicos sociales ha descubierto que el futuro de una persona está determinado por su origen. La conclusión es que no vivimos en una meritocracia plena, es decir, en un sistema donde los poderes (económicos, políticos, civiles) se distribuyen de acuerdo al esfuerzo y logros demostrados; una conclusión que confirman Ivanka Trump o Irene Montero. No queda claro si la meritocracia sigue siendo algo deseable. Si no lo es, me pregunto qué sistema debe imperar en un proceso de selección. Y si el mérito no sirve, ¿con qué criterio seleccionaron al comité científico que elaboró el informe?
