Navidad con historia
«La divulgación histórica está en un momento de auténtico auge, y que es mucho más que una moda pasajera»
Me van a permitir que un día como hoy, y sabiendo que están por llegar Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente, y sabiendo como sé que también son todos ustedes, amables lectores de esta columna de «Divulgando que es Historia», unos amantes de la maestra Clío, me van a permitir que les ayude en sus cartas a los nobilísimos Melchor, Gaspar y Baltasar. ¡Y hasta a Artabán si así lo desean! Y, les aviso, que aunque estemos en tiempos de Paz y de Amor, sé que malpensados siempre hay: no, no me llevo comisión de cada ejemplar, ni las editoriales me financian, ni los autores citados me van a llevar invitado al Charolés. ¡Que sería un detalle, no les digo que no! Pero sepan que es una selección que me permito hacerles y que, como dice el clásico, no están todos los que son, pero son todos los que están. Seguro que se les ocurren otros títulos y autores, lo que me alegrará, porque eso significa que la divulgación histórica está en un momento de auténtico auge, y que es mucho más que una moda pasajera. ¡Vamos al turrón!
Pensando, como tiene que ser, en los más pequeños, sin duda que tienen un filón con el proyecto de Gestas de España. Cómics para los más críos del hogar, con las figuras (¡nada menos!) de Blas de Lezo, Agustina de Aragón y de El Gran Capitán. Pero su trilogía de curiosidades para leer en familia, que así la nominan, es una gollería de las que no hay que perderse. Recorriendo la propia Historia de España, lo que fue España en el mundo, e incluso sus cuentos y leyendas. La verdad es que ha sido un acierto, pues era un vacío el que existía en el género de historia para niños. El doctor en Historia Fermín Valenzuela, el capitán del Ejército del Aire (y del Espacio) Manuel Ángel Cuenca, y la ilustradora licenciada en Bellas Artes Gloria Cuenca, han hecho sin duda un acierto en este proyecto publicado por EDAF.
Pero no hay que olvidar el que es un clásico y un referente de la divulgación histórica en España para los jóvenes (¡y no tan jóvenes!) como es Academia Play. Un proyecto que aúna el éxito de su canal de YouTube que es posible disfrutar de él como App en el teléfono para los más modernos, y que está a punto de alcanzar la increíble cifra de tres millones de suscriptores. ¡Para que luego se diga que a las nuevas generaciones no les gusta la Historia! Los animo a suscribirse al mismo, y a echar un vistazo a sus obras. Pues su La Historia de España como nunca antes te la habían contado se ha convertido en un referente visual gracias a su novedoso formato y el estar mega ilustrado con ese estilo tan personal. Otro libro recomendado de este sello, con Javier Rubio Donzé a la cabeza del mismo, y para todas las edades, es su Veinticinco grandes batallas de la Historia, una obra rigurosa a la par que amena, que suele decirse.
Hay otras formas de acercarse a la Historia, sin duda, y el formato cómic a mí siempre me ha fascinado. Pues es una forma de acceso a la juventud para ser picados por la curiosidad en este tema, y descubrir momentos que, seguramente de otro modo, ni locos se les hubiera ocurrido acercarse a ellos. Es por esto por lo que el proyecto de Cascaborra Ediciones es ahora mismo una auténtica máquina del tiempo hacia momentos y personajes de la Historia de España, muchos de ellos apenas tratados. Así vamos a viajar a Flandes con nuestros Tercios, o sufrir con ellos el asedio de Castelnuovo. Vamos a estar presentes en Covadonga con Pelayo, en los Castillejos con el general Prim, en Cartagena de Indias con Blas de Lezo, en Pensacola con Bernardo de Gálvez. Un viaje a Bailén, a Numancia, a Pavía, a Trafalgar y a Rocroi. Conocer a Catalina de Erauso o a María Pita. Sufrir en 2 de Mayor en Madrid, ver en 1492 la toma de Granada, o encontrarnos con los últimos de Filipinas en Baler. Sorprende que un proyecto tan ambicioso no haya tenido apoyos públicos desde Cultura para que esta manera de divulgar sea más accesible y conocida entre su público objetivo.
Los mayores de la casa no tienen por qué quedarse sin recomendaciones de primer nivel que pedir a los Reyes Magos, faltara o faltase. De este modo hemos visto como a lo largo del año han aparecido obras para todos los gustos. Dos sorpresas destacan: una, la reivindicación del desconocido y maltratado siglo XVIII mediante la llamada Marina Ilustrada. De la mano del gijonés Guillermo Nicieza nos llegó Leones del mar. Pues es difícil encontrar una nación que en un centenar de años haya reunido en el mismo cuerpo militar a hombres tan notables como Jorge Juan, Antonio de Ulloa, Vicente Tofiño, Luis de Córdova, Juan José Navarro, Blas de Lezo, José de Mazarredo, Antonio de Escaño, Cosme de Churruca, Dionisio Alcalá-Galiano, Antonio Barceló o Francisco de Balmis. Y mujeres, como Ana María de Soto e Isabel de Zendal. ¡Vaya plantel! Para que luego vayan diciendo que fue época de decadencia y tal.
La otra novedad ha venido de uno de los blogueros más conocidos y veteranos en redes sociales. Me refiero a El Reto Histórico. Su creador, el miembro de la Armada Miguel Ángel Ferreiro, ha publicado una obra que viene con ganas de ser una obra de referencia sobre una parte dejada de lado de nuestra Historia: la africana. De este modo, su La segunda columna, que lleva como subtítulo «lo que dejamos en África», donde nos hará un recorrido desde la mítica Tombuctú hasta Guinea Ecuatorial, único país africano cuyo idioma oficial es el español. Iremos con los exploradores hispanos que en tiempos de Roma recorrieron el Sáhara; la unión de la Mauritania Tingitana a la Diócesis de Hispania; Orán; Ceuta y Melilla; la gran Gadir controladora de las rutas africanas a Mogador y, por supuesto, no se olvidará de Cartago. Pero tampoco de curiosidades impactantes. ¿Sabía que Felipe II, el rey prudente, fue protector del Congo? ¡Yo no, lo reconozco! Y lo supe gracias a ésta más que recomendable obra.
No quiero acabar la que sería una interminable lista de libros recomendables (¡que me perdonen los no citados!), sin citar a quién más hizo porque la figura de Juan Sebastián de Elcano fuera reconocida en un V Centenario que casi pasa sin pena ni gloria. Me refiero al alicantino e ingeniero de profesión (¿dónde estabais, historiadores, joer, luego nos quejamos?), Tomás Mazón, que tras su Elcano, nos ha descubierto otra figura de esa primera circunnavegación de la historia hace 500 años nada menos. La de Espinosa, el último capitán de la vuelta al mundo, donde se cuenta la vida entre mares revueltos y tierras salvajes, de un hombre fiel a su rey, a su patria, a sus compañeros y a sus amigos. Un hombre que representó una virtud: la de guardar las promesas. Este libro también las guarda. Y yo, sinceramente, me parece un imperdible para los amantes de la Historia. Como todos los citados, va de suyo. ¿Cuál va a pedir a Sus Majestades? Sea generoso. ¡Hágase con todos!