A Feijóo y Rubiales los pintan calvos…

El triunfaperdedor de las elecciones, «aibó, aibó, me voy a fracasar», ha conseguido agónicamente que el rey le dé la absolución antes de apurar el amargo trago de la no investidura. Lo noticioso, la verdad, es que el rey haya querido, ¡por una vez y sin que sirva de precedente! asentar jurisprudencia, ¡basada en  la costumbre!. No en vano es un hombre de buenas y saludables ídem, se dirá. 

Por ello, ha decidido ratificar la tradición de dar la encomienda  del primer intento de investidura al líder de la lista más votada, aún sea obvio que Feijóo no cosechará ni cosecharía los 4 votos que le faltan, aunque tuviera la entera legislatura para intentarlo: la razón es Vox populi, nunca mejor escrito.

La ultima ratio del monarca es aquello tan cursi como inexacto de «poner el marcha el reló de la democracia»: la democracia no es un reló, ni hay que darle marcha; activar el mecanismo de una repetición electoral, porque el resultado de la urnas no permite conformar gobierno, es más bien un fracaso estrepitoso de la democracia. Pero las metáforas, cuando son cursis, tienen la piel muy dura.

De no temer tanto el ser acusado de borbonear, más vale y nos habría valido, en el marco de las consultas a que está obligado, haber organizado una buena quedada con feijóo y sánchez que les hiciera salir del despacho merecedores de la mayúscula de sus apellidos.

De aquí un mes, y sin limitación de tiempo ni autointerrumpiéndose como en el cara a cara, Feijóo intentará hacer lo que no hicieron en su día los Arrimadas, Rajoy, (y lo que habría querido hacer Rivera): desgranar una detallada, razonada y razonable alternativa a la que se avecina, a poco que Sánchez revalide sus 178  armengoles.

Coda única: David Rubiales contra Gaia Goliat 

Nadie medianamente informado duda de que Rubiales hace tiempo ameritaba, mero principio de precaución, haber cesado en el cargo, tantas son las turbias turbulencias que su gestión ha deparado, algunas de las cuales con efectos que se siguen desplegando en el tiempo, como el ignominioso aval, a medias con Piqué, al régimen de Arabia Saudí comprado a golpe de latigazos a las mujeres del reino.

Sin embargo, como un Al Capone descuidando declaración de impuestos, se lo ha acabado llevando por delante el menor de sus pecados, grotescamente ampliado por la lupa del wokismo y el feminismo más irracional y vengativo.

Algunas consideraciones al hilo de los acontecimientos: si el realizador de la señal TV FIFA hubiese distraído la cámara, como suele hacer, hacia otro plano (espectador en tribuna disfrazado de mameluco o adolescente histérico haciéndose un selfie) durante ese momento de la ceremonia impositiva (casi siempre un coñazo, y que dios me perdone), o siquiera el ángulo de ataque de la cámara en el momento del beso hubiese sido ligeramente distinto… el mundo, como se decía de la longitud nariz de Cleopatra, habría sido muy otro.

Parece plausible que, vistas las imágenes en que es levantado por ella, y a expensas de lo que digan los lectores de labios, la secuencia picuda denote complicidad y no desentone respecto a los abrazos anteriores y posteriores a las campeonas del mundo. 

Pero nadie está interesado en mostrar la secuencia larga. Será porque culmina en el manteo de las jugadoras (incluida, la ofendida) al mismísimo Rubiales, ese que acababa de humillar a la heroína y hermosa Hermoso (y que dios me vuelva a perdonar). El manteo a Rubiales, it’s not fake: aquí. 

Es otra consideración el que Hermoso ha ido modulando su versión de «lo sentido» (sic, la dictadura del sentimiento) al compás de las portadas nacionales e internacionales y de los perentorios tuits del frente del progreso, Sánchez, Iceta, Díaz, Montero y Echenique. Indepes, peperos, nadie quiere ser menos. Ya solo falta Vox por subirse al carro.

Y, por fin, es otra consideración que por mucho que Rubiales haya bramado algunas verdades de porquero (de Agamenón), su suerte está echada, y las palmas de la Asamblea de la RFEF se han ido tornando en  lanzas conforme pasan las horas…

Y ahora, ya más calvo que la una, después de que la FIFA lo haya sancionado preventivamente y dictado orden de alejamiento (como si fuera un potencial violador), abandonado hasta por los suyos, que ya huelen la cadaverina (casi todo el equipo técnico de las campeonas, el absoluto De la Fuente: sólo resisten Vilda y Medina Cantalejo…), el hombre ya sin atributos se encamina hacia el deshonor, encomendándose a unos lejanos tribunales cuyas sentencias, en el mejor de los casos, y si le son medio favorables, llegarán cuando sean las hijas de sus hijas y las que habrán de tomar nota de quién fue su padre.  Y todos por entonces calvos, como él.

Caaaaaaampeonas del mundo. Sí. Doblemente.

© Leonardo Giovannini

Fisking Cercas. 

En su semanal Palos de ciego (cuán cierto) el intelectual orgánico se arranca por unas peteneras que bien merecen un fisking, ya que el maestro y revelador principal del Reino, AE, incumpliendo su cuarentena decenal acerca de Cercas, ha declinado (y ya van dos: Cf. Cómo se parecen los peces en el río).

“La pregunta no es por qué podrán usarse allí las lenguas a partir de ahora, sino por qué, hasta ahora, no se podían usar”.

• Porque no había masa crítica de chantaje suficiente, y porque cooficial significa territorializada; y porque hubo, o mores, un antes de Babel. 

“…porque vivimos encerrados todavía en un molde mental nacionalista, que nos está asfixiando”

• Léase: un doble molde, igual de pernicioso el uno que el otro: el nacionalista españolista/españolazo, que traga; y el de los nacionalismos bilingües, centrífugos y desleales que agendan acabar con el estado y, si se tercia, por la vía de los hechos. Qué asfixia.

 “en finés hay 40 maneras de decir “nieve”, pero todas tienen su equivalente en castellano” 

• Esa coriácea leyenda urbana, perdón: boreal: de aurora boreal. Se suele emplear respecto de la lengua de los esquimales inuits: no es cierta, obviamente. Pero Cercas seguro que encuentra 50 sombras de nieve ¡y más!: nievo, nievu, nievi, niuvu, y, sobre todo ¡nevenka!

“…algunas lenguas se han convertido en tesoros y todas merecen respeto, porque hay personas que las hablan”

• O sea, a las lenguas muertas, sánscrito, arameo,  griego y latín, que las den. 

“no hay comparación posible entre leer un poema en original y leerlo en traducción (por buena que sea)”. 

• Si supieras Javi, cuantas traducciones mejoran los originales, ¡también en novelística!

 “A veces, claro está, se ha usado el catalán para mal, para muy mal”.

• Y para bien.  Tu próxima novela que sea en catalán: como dijo  Eugenio D’Ors: todo lo que no es tradición, es…

“… pero con ese mismo fin perverso se han usado todas las lenguas, que no son responsables de las fechorías que con ellas se cometen…”

• ¡Un Núremberg de las lenguas ya!

“No es que el catalán deba poderse hablar en el Congreso; es que debe difundirse en los colegios y las universidades de toda España”

• Ûber alles! I parla la lengua de Waterloo, maquetu.

 “…y figurar en los aeropuertos, las estaciones de tren, las monedas y donde haga falta (incluida la UE)”.

• En las monedas es donde hace más falta, en efecto. Y que cante Serrat por fin en catalán en Eurovisión: Memoria histórica.

“El secesionismo no se puede refutar con eficacia más que en catalán, porque lo que se ha montado en catalán sólo se puede desmontar en catalán”

• Mutatis tontatis:  y el nazismo solo se puede desmontar en alemán, el antisemitismo solo en hebreo o en yiddish, y así seguido….

“¿Que hablar en catalán en el Congreso es caro? Claro, pero es que la democracia es cara”

• Y pasar del “Madrit ens roba” a “Que pagui Madrit”.

“España es a casi todos los efectos un Estado federal; sólo le falta cobrar conciencia de sí misma como tal y obrar en consecuencia.”

• Yo soy federal, federal federal…  Y yo que pensaba que aspiraban a ser simplemente federadas. Tod@ semos hermos@.

“Y sí: España se toma mucho más en serio que Cataluña su propia diversidad, pero debería tomársela mucho más en serio todavía. No porque lo exija nadie: porque es justo y necesario”

 En efecto, porque es justo… e innecesario. Amén