Hallado en Cercedilla el cadáver de Blanca Fernández Ochoa
El cuerpo ha sido encontrado en el Pico de la Peñota, ubicado en el límite entre Segovia y Madrid
Los perros de la Guardia Civil han llevado a las autoridades hasta un cadáver en Cercedilla, precisamente en el lugar donde se busca a la medallista olímpica Blanca Fernández Ochoa. Poco después, han confirmado que el cadáver es el de la exesquiadora, desaparecida desde el pasado 24 de agosto.
El hallazgo del cuerpo ha tenido lugar en el tercer día de búsqueda por el operativo desplegado en esa zona de la sierra madrileña y el cadáver ha sido encontrado en el Pico de la Peñota, ubicado en el límite entre Segovia y Madrid y a unas dos horas del lugar en el que se encontró su coche. Blanca Fernández Ochoa fue la primera mujer española en lograr una medalla en unos Juegos Olímpicos de Invierno al obtener el bronce en eslalon gigante los Juegos de Albertville 1992. Veinte años antes, su hermano Paco había logrado el oro en los Juegos de Sapporo 1972.
La noticia ha sido comunicada a los familiares de Blanca Fernández Ochoa, que se encontraban en la zona de coordinación del aparcamiento de las Dehesas, tras lo que han abandonado la carpa en la que se encontraban.
El presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, ha expresado la «absoluta consternación» del organismo por la muerte de la medallista olímpica, a la que ha definido como «una leyenda del deporte español y mundial». «Absolutamente consternados y apenados por el fallecimiento de Blanca Fernández Ochoa. Mi más sincero pésame y el de todo el movimiento olímpico español a sus familiares y amigos. Hoy decimos adiós con tristeza a una leyenda del deporte español y mundial. DEP», ha escrito en la cuenta de Twitter del COE.
Alejandro Blanco: «Absolutamente consternados y apenados por el fallecimiento de Blanca Fernández Ochoa. Mi más sincero pésame y el de todo el movimiento olímpico español a sus familiares y amigos. Hoy decimos adiós con tristeza a una leyenda del deporte español y mundial. DEP» pic.twitter.com/fiJeZCrwPh
— COE (@COE_es) September 4, 2019
La Real Federación Española de Deportes de Invierno (RFEDI) ha emitido un comunicado para expresar sus condolencias por el fallecimiento de Blanca Fernández Ochoa, a la que la entidad recuerda como «una mujer afable, activa y apasionada de los deportes que, a la sombra de sus hermanos y siempre con la complicidad de su hermana Lola, otra gran esquiadora, se labró una gran carrera deportiva en el esquí alpino que siempre ha brillado con luz propia». «El equipo de la RFEDI al completo quiere transmitir su más profundo pesar a la familia Fernández-Ochoa, amigos, a todo el pueblo de Cercedilla y a los amantes de los deportes de invierno que tanto disfrutamos con los éxitos de Blanca», concluye el comunicado.
También el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha querido enviar su «cariño» a la familia a través de su cuenta de Twitter.
La solidaridad, el apoyo y el calor humano se han sentido estos días en la sierra de Cercedilla. Profesionales de las FCSE, servicios de emergencias y numerosos voluntarios se han volcado en la búsqueda de #BlancaFernándezOchoa.
Pero no pudo ser.
Mi cariño para toda su familia. pic.twitter.com/dQsrKpIe8P— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) September 4, 2019
La brillante carrera de Blanca encontró inicialmente inspiración en la gesta olímpica de su hermano. Un triunfo que se produjo cuando ella tenía ocho años y que rememoró en una entrevista con Efe en 2014, antes de los Juegos de Sochi (Rusia). «Recuerdo que, por la diferencia horaria, la carrera se veía aquí en España sobre las cuatro o las cinco de la mañana. Vivíamos en la Escuela de Esquí, en Navacerrada. Recuerdo a mi padre gritando: ‘¡Oro, oro, oro!’. Gritaban los profesores de esquí, gritaba todo el mundo. Me desperté y me levanté. Todo el mundo estaba saltando y gritando», recordaba la campeona madrileña. «Me acuerdo del recibimiento, cuando regresó a España. Mi hermano era campeón olímpico, pero tardé en valorar lo que realmente había conseguido. Que fue algo increíble», indicaba a Efe Blanca. Su medalla llegó casi por imperativo legal, cuatro años después de protagonizar, en 1988, uno de los momentos más impactantes de toda la historia de la nieve española. Al rozar la gloria olímpica, en Calgary (Canadá), se cayó en la decisiva segunda manga después de haber sido la mejor en la primera.