El 26J vuelve a dejar la gobernabilidad en mano de los pactos
Todo apunta a que la investidura, si se produce, se hará en segunda vuelta, ya que no hay una previsible coalición de partidos que logre los 176 escaños de la mayoría absoluta. Una vez más, Pedro Sánchez tendrá la llave para decidir quién gobernará España; el líder socialista, tras evitar el sorpasso de Unidos Podemos y con el peor resultado de la historia del PSOE, debe decidir si pacta con la izquierda y los nacionalistas, en contra de los barones de su partido, o se hace el harakiri pactando con Rajoy o facilitando un gobierno del PP sin mayoría absoluta. La coalición del centro derecha está lejos de esa ansiada mayoría (PP y Ciudadanos suman 169 escaños). Otra lectura que nos deja las urnas, es el castigo que los electores han dado al famoso pacto del abrazo entre Albert Rivera y Pedro Sánchez, los grandes perdedores de estas elecciones. Otra posible coalición, aunque improbable, sería una coalición de izquierdas y partidos nacionalistas, líderada por PSOE (85) con la suma de Unidos Podemos (71), CDC (8), PNV (5) y Esquerra Republicana (9). Sin embargo, la línea roja del referéndum catalán hace inviable esta ecuación, como ya ocurrió en las pasadas elecciones.
El escenario político que queda tras el 26J es igual de incierto que el que salió en las anteriores elecciones. Los partidos están obligados a llegar a acuerdos para poder gobernar. Las declaraciones de los líderes de los principales partidos no despejan dudas sobre los pactos. Mariano Rajoy ha asegurado que el PP «se merece un respeto» tras proclamarse vencedor de la noche. Por su parte, Pedro Sánchez se ha reivindicado como el líder de la izquierda tras frenar el sorpasso de Podemos; Pablo Iglesias tiende la mano para lograr un Gobierno progresista y Ciudadanos, el gran perdedor, reitera su llamamiento a la gran coalición junto a PP y PSOE.
Todo apunta a que la investidura, si se produce, se hará en segunda vuelta, ya que no hay una previsible coalición de partidos que logre los 176 escaños de la mayoría absoluta. Una vez más, Pedro Sánchez tendrá la llave para decidir quién gobernará España; el líder socialista, tras evitar el sorpasso de Unidos Podemos y con el peor resultado de la historia del PSOE, debe decidir si pacta con la izquierda y los nacionalistas, en contra de los barones de su partido, o se hace el harakiri pactando con Rajoy o facilitando un gobierno del PP sin mayoría absoluta. La coalición del centro derecha está lejos de esa ansiada mayoría (PP y Ciudadanos suman 169 escaños). Otra lectura que nos deja las urnas, es el castigo que los electores han dado al famoso pacto del abrazo entre Albert Rivera y Pedro Sánchez, los grandes perdedores de estas elecciones. Otra posible coalición, aunque improbable, sería una coalición de izquierdas y partidos nacionalistas, líderada por PSOE (85) con la suma de Unidos Podemos (71), CDC (8), PNV (5) y Esquerra Republicana (9). Sin embargo, la línea roja del referéndum catalán hace inviable esta ecuación, como ya ocurrió en las pasadas elecciones.