Relegados 12 diputados filipinos por mostrarse en contra de la pena de muerte

La Cámara de Representantes de Filipinas ha destituido este miércoles a 12 diputados que se negaron a aprobar la reinstauración de la pena de muerte. Tal y como prometió el presidente Rodrigo Duterte, el pasado día 7 se aprobó en tercera votación por 216 votos a favor, 54 en contra y una abstención la ley 4727 que contempla castigar con la pena de muerte a aquellas personas que cometan delitos relacionados con las drogas. Filipinas se convertía así en el primer país del sureste asiático en instaurar de nuevo la pena capital.

De los congresistas que votaron en contra, 12 serán relevados de sus escaños en mayo, entre los que se encuentran presidentes y vicepresidentes de comités, según ha informado el líder de la mayoría gobernante, Roberto Fariñas, a instancias del presidente de la Cámara, Pantaleón Álvarez.

La vicepresidenta de la Cámara y ex presidenta del país, Gloria Macapagal Arroyo, bajo cuyo mandato se abolió la pena de muerte, también perderá su cargo por mostrarse en desacuerdo con la ley. Además, el diputado que se abstuvo y los que no se presentaron a la votación han recibido la amenaza directa del presidente Duterte y podrían correr la misma suerte que sus todavía compañeros de escaño.

«Si estoy destruyendo puentes, que así sea. No podemos hacer nada al respecto», aseguró el presidente de la Cámara, quien había formulado esto mismo antes de la votación a los opositores de Duterte. “Ya hemos pedido a las respectivas partes que presenten a los sustitutos», dijo Álvarez después de anunciar la suspensión en el cargo de los 12 diputados.

El proyecto se encuentra ahora en el Senado que deberá celebrar otras tres votaciones en los próximos meses antes de que entre en vigor como ley.