La UE pide a Somalia que ponga fin a las ejecuciones de yihadistas
La delegación de la Unión Europea en Somalia ha criticado este jueves las recientes ejecuciones de yihadistas por la justicia militar somalí, y ha emplazado al Gobierno de Mogadiscio a decretar una moratoria sobre la pena de muerte en el país del cuerno de África. «La UE condena de la manera más enérgica todos los actos de terrorismo y apoya la aplicación de sentencias duras, pero también se opone por principio a la pena de muerte en todas las circunstancias», se puede leer en un comunicado difundido por la delegación.
Una delegación de la Unión Europea en Somalia ha criticado este jueves las recientes ejecuciones de yihadistas por parte de la justicia militar somalí, y ha emplazado al gobierno de Mogadiscio a decretar una moratoria sobre la pena de muerte en el país del cuerno de África. «La UE condena de la manera más enérgica todos los actos de terrorismo y apoya la aplicación de sentencias duras, pero también se opone por principio a la pena de muerte en todas las circunstancias», informa en un comunicado la delegación.
La justicia militar somalí fusiló el lunes 24 de abril a cuatro miembros de Al Shabab acusados de llevar a cabo un ataque con bomba en 2016 en Baidoa, un estado del sudoeste del país, y condenados por el Tribunal Militar de Somalia. También ha habido varios integrantes de los cuerpos de seguridad estatales ejecutados recientemente por matar a civiles, entre ellos dos agentes de policía por asesinatos que tuvieron lugar en Afgoye y Hudur, respectivamente, y un soldado por un asesinato cometido en Burhakabo.
«La UE considera la pena de muerte un castigo cruel e inhumano, que no disuade de comportamientos criminales», ha asegurado la oficina de la UE en Somalia, que ha argumentado también que la pena de muerte convierte cualquier error de la justicia en irreversible. La delegación de la UE ha pedido asimismo a Mogadiscio que deje de entregar a civiles a la justicia militar y sean juzgados por tribunales civiles.
«Queremos apoyar a las autoridades somalíes en la adopción de una legislación adecuada para abolir el uso de la pena de muerte», concluye el comunicado.
La aplicación de la pena de muerte a miembros de Al Shabab declarados culpables de perpetrar atentados, es habitual en Somalia. Al Shabab, que se afilió en 2012 a la red internacional de Al Qaeda, controla parte del territorio en el centro y el sur del país y aspira a instaurar un Estado islámico de corte wahabí en Somalia. La milicia islamista atenta regularmente contra civiles, militares y políticos. Somalia, considerado un Estado fallido, vive en un estado de guerra y caos desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barré.