Sally Yates alerta a la Casa Blanca de un posible chantaje de Rusia sobre Flynn
La exsecretaria interina de Justicia, Sally Yates, ha dicho al Congreso la noche de este lunes que ha alertado a la Casa Blanca que el asesor de Seguridad Nacional, Michael Flynn, “podría ser chantajeado” porque al parecer había mentido a sus superiores sobre los contactos que ha tenido con el embajador de Moscú en Washington.
La exsecretaria interina de Justicia, Sally Yates, ha asegurado al Congreso que ha alertado a la Casa Blanca sobre que el asesor de Seguridad Nacional, Michael Flynn, “podría ser chantajeado”, ya que al parecer, habría mentido a sus superiores sobre los contactos que había tenido con el embajador de Moscú en Washington.
Yates, que era funcionaria del presidente Barack Obama y ha sido despedida poco después por otras razones, ha hecho sus primeras declaraciones públicas sobre las preocupaciones que había expuesto y ha proporcionado detalles sobre la cadena de acontecimientos que ha tenido como desenlace la salida de Flynn del nuevo gobierno.
El testimonio de Yates y la revelación horas antes de que el presidente Barack Obama había advertido a Trump en noviembre pasado de que no contratara a Flynn por sus nexos con Rusia, ha dejado claro que las alarmas sobre el general habían alcanzado desde hacía meses los niveles más altos del gobierno federal.
Flynn había sido asesor de Donald Trump y un abierto partidario de la candidatura presidencial del multimillonario.
Yates, que ha comparecido ante una comisión del Senado que investiga la intromisión rusa en los comicios presidenciales de 2016, ha descrito sus conversaciones de finales de enero con Don McGahn, el abogado de la Casa Blanca de Trump, en las que ha asegurado que Flynn no había dicho toda la verdad al gobierno sobre sus contactos con el embajador ruso Sergey Kislyak.
Los funcionarios de la Casa Blanca insistieron en su momento en que Flynn no había conversado con Kislyak sobre las sanciones impuestas por Estados Unidos durante el periodo de transición presidencial, pero solicitaron la renuncia a Flynn después que surgieran informaciones de que había mentido sobre la naturaleza de sus llamadas telefónicas.
“Consideramos crucial que la Casa Blanca tuviera esta información, en parte porque el vicepresidente hacía declaraciones falsas al público sin saberlo, y porque considerábamos que el general Flynn posiblemente estaba en riesgo”, ha señalado Yates.
“Para señalar lo obvio, nadie quiere que su asesor de seguridad nacional esté comprometido con los rusos”, ha agregado.
Yates ha dicho que ha informado del asunto a la Casa Blanca de Trump para que adoptara “las medidas que considerara pertinentes” y que creía que los rusos ya sabían que Flynn había engañado a funcionarios del gobierno.