Pence finaliza su gira por Israel entre protestas palestinas y una convocatoria a huelga general
Pence finaliza su gira por Israel entre protestas palestinas y una convocatoria a huelga general
El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, ha finalizado su gira por Oriente Medio con una breve pero simbólica visita al Muro de las Lamentaciones, lugar sagrado del judaísmo, en la Ciudad Vieja de Jerusalén, que la comunidad internacional considera territorio palestino ocupado. El funcionario había llegado el pasado domingo entre protestas hechas por palestinos tras la polémica decisión del presidente Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel.
El Movimiento Palestino de Liberación Nacional (Al-Fatah), del presidente palestino, Mahmud Abás, convocó el domingo una “huelga general” para este martes, coincidiendo con el último día de la visita de Pence, para protestar por la polémica medida tomada por Washington. El viaje de Pence se planteaba para diciembre, pero se prorrogó por la furia y protestas palestinas que han dejado al menos 30 muertos, 7.000 heridos y 1.000 detenidos en Palestina, según su presidente.
Mientras las autoridades palestinas han boicoteado la visita de Pence y destacan que Estados Unidos no será parte de las discusiones sobre la paz si no cambia su postura ante Al-Quds (Jerusalén), el primer ministro de Israel, Benyamin Netanyahu, sigue insistiendo en la participación de Washington en ese proceso.
El discurso «mesiánico» del vicepresidente Pence ante el parlamento israelí es «un regalo a los extremistas», denunció el lunes un alto responsable palestino. Entre tanto, Pence aseguró que la embajada de Estados Unidos en Israel abrirá en Jerusalén antes de fin de 2019, pese a la cólera palestina.
«Este discurso mesiánico es (…) la prueba de que la administración estadounidense forma parte del problema y no de la solución», ha twitteado el número dos de la Organización para la liberación de Palestina (OLP), Saeb Erakat.
Pence llegó sobre las 12:45 (hora local) al Muro de las Lamentaciones, con la cabeza cubierta como es preceptivo por una kipá (solideo judío) y leyó una breve oración, antes de depositar una nota con una petición en una ranura del muro y posar sus manos sobre las piedras. El presidente estadounidense, Donald Trump, fue en mayo pasado el primer mandatario occidental en activo en visitar el principal lugar de culto judío, que otros dirigentes habían evitado incluir en su itinerario oficial por su significado político.
El vicepresidente fue recibido por el rabino del muro, Shmuel Ravinovich, que le agradeció en nombre del pueblo judío, a él y a Trump, «el coraje de llevar la luz al mundo, frente a la oscuridad». Con esta simbólica visita, Pence concluyó los actos oficiales de la segunda jornada de su viaje, que comenzó esta mañana en la residencia del presidente israelí, Reuvén Rivlin, en Jerusalén. «Le agradecemos lo que hace ha hecho por el pueblo judío, hace y lo que hará», remarcó el mandatario israelí.