JxCat y ERC exploran mecanismos de coordinación para evitar desacuerdos

El tenso desencuentro protagonizado el miércoles por Junts Per Catalunya (JxCat) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) «se está encarrilando de forma positiva». Así lo ha dicho el portavoz de la primera formación, Albert Batet, a la vez que ha confirmado que ambos partidos están explorando «nuevos mecanismos de coordinación» para evitar rifirrafes como los que se produjeron este miércoles en el Parlament de Cataluña, que llevaron al presidente de la Cámara regional, Roger Torrent, a suspender un pleno. El enfrentamiento entre JxCat y ERC estuvo motivado por el desacuerdo en torno a si hay que sustituir temporalmente a los seis diputados suspendidos por el Tribunal Supremo o bien debe dejarse al margen de esta medida al expresidente catalán Carles Puigdemont.

En una rueda de prensa realizada en el Parlament, Batet ha explicado que este jueves ya se han producido los primeros contactos con sus socios de Gobierno de ERC para tratar de superar la crisis abierta el miércoles, al mantener posturas distintas en la Mesa y, además, intercambiar acusaciones mutuas y reproches. «Las relaciones se están encarrilando de forma positiva», ha indicado Albert Batet en una comparecencia de prensa en la que también ha afirmado que se están buscando «nuevos mecanismos de coordinación con ERC» para evitar «que lo que sucedió ayer [por el miércoles] no se repita».

Sobre la suspensión y posible sustitución temporal de los diputados acusados de rebelión, Batet ha señalado que encontrarán «la forma adecuada» para garantizar la preservación de sus derechos políticos. «Hoy [por el jueves] ha habido cambios importantes en su situación procesal y ahora son personas libres las que están en otros países europeos», ha apuntado en relación con la retirada de la euroorden que pesaba sobre los políticos independentistas acusados de rebelión que se encuentran en Bélgica, Alemania, Reino Unido y Suiza.

Previamente, la ANC (Asamblea Nacional Catalana) había dado un toque de atención a JxCat y ERC por su enfrentamiento público en el Parlament, al exigirles «responsabilidad, unidad de acción y una estrategia coherente para retomar el camino a la independencia«. Esta mañana, el vicepresidente primero del Parlament y diputado de JxCat, Josep Costa, aún insistía en reprochar a Torrent que hubiese aprovechado un «receso» en la reunión de la Mesa para «pactar» con el PSC las suspensión de los diputados procesados. La portavoz del grupo PSC-Units en el Parlament, Eva Granados, lo ha negado y ha pedido a JxCat que no use a los socialistas como «excusa» para tapar su división con ERC. Por su parte, el portavoz parlamentario de Ciudadanos, Carlos Carrizosa, ha asegurado que su grupo estudia presentar un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional si el debate monográfico sobre la «convivencia», que no se celebró al ser desconvocado el pleno, no se celebra antes del 31 de julio.

Mientras tanto, a través de Instagram, Puigdemont ha hecho un llamamiento al soberanismo a superar «viejas estructuras, desconfianzas, intereses y rencores». Ha sido una jornada de euforia en las filas de JxCat, después de que el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena haya rechazado la extradición de Puigdemont solo por malversación, como falló el tribunal alemán de Schleswig-Holstein, y también haya retirado las órdenes europeas e internacionales de detención contra los exconsellers Antoni Comín, Clara Ponsatí, Lluís Puig y Meritxell Serret, además de la secretaria general de ERC, Marta Rovira.

El abogado belga de Puigdemont, Paul Bekaert, ha confirmado que el expresidente de la Generalitat regresará a Bélgica «la próxima semana». El regreso de Puigdemont a la residencia que alquiló en Waterloo reabre los escenarios que planificaron JxCat y ERC para «internacionalizar» la causa independentista. El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha afirmado que la retirada de euroórdenes es una «nueva victoria» que demuestra que la justicia en Europa no acepta «trampas ni menús a la carta» y ha urgido la excarcelación de los independentistas presos. El presidente del grupo parlamentario de Catalunya en Comú Podem, Xavier Domènech, ha denunciado la «bancarrota absoluta» de la estrategia judicial contra el proceso soberanista, informa Efe.