Simbólica ceremonia para reconectar las dos Coreas por tren y carretera
Una delegación surcoreana ha viajado a Corea del Norte este miércoles para participar en una ceremonia simbólica de inauguración de las obras de conexión ferroviaria y por carretera de la península dividida
Una delegación surcoreana ha viajado a Corea del Norte este miércoles para participar en una ceremonia simbólica de inauguración de las obras de conexión ferroviaria y por carretera de la península dividida, pese al bloqueo del diálogo sobre la desnuclearización.
Un tren especial con un centenar de surcoreanos a bordo, incluyendo altos cargos y cinco personas nacidas en el Norte, ha partido de Seúl a primera hora de la mañana con destino Kaesong, una ciudad fronteriza de Corea del Norte.
El tren llevaba pintado el emblema: «Construyamos juntos una era de paz y de prosperidad, reconexión del ferrocarril y de las carreteras Sur-Norte».
Una decena de personas se han manifestado contra el dirigente norcoreano Kim Jong-un y contra la conexión ferroviaria, denunciando que podría provocar la transformación de la península en un régimen comunista.
La televisión surcoreana ha emitido dos horas después una fotografía en la que aparecía el tren llegando a Kaesong, donde se celebrará la ceremonia.
El presidente surcoreano, Moon Jae-in, y Kim Jong-un acordaron realizar este acto antes de que terminara el año en la tercera cumbre intercoreana de este año.
Hubo quien expresó sus dudas de que el tren y las mercancías que pudiera transportar supusiera una violación de las sanciones contra Corea del Norte a causa de sus programas nuclear y balístico, pero el Consejo de Seguridad de la ONU concedió una exención para el acontecimiento, según la prensa local.
Seúl ha dejado claro que la ceremonia no significaría en sí el inicio de las obras de reconexión y de modernización de las redes.
Las dos Coreas siguen técnicamente en guerra, ya que el conflicto terminó en 1953 con un armisticio y no con un tratado de paz.
Se trata de una «prueba» del «compromiso» de ambos países en el proyecto, declaró un portavoz del ministerio surcoreano de Unificación. Las obras dependerán «de los progresos realizados en la desnuclearización del Norte y las circunstancias relativas a las sanciones».
Antes de su división, en 1948, dos líneas ferroviarias cruzaban la península, por el este y por el oeste.
Seúl presupuestó unos 63.400 millones de wones (49,65 millones de euros) en inversiones para el año próximo, partiendo del principio de que se necesitarán cinco años para reparar y modernizar ambas líneas.
Sin embargo, las conversaciones entre Pyongyang y Washington para que el Norte renuncie a su arsenal atómico están en punto muerto.