El Gobierno acepta que Díaz lidere la mesa de la reforma laboral, pero exige que participe Calviño

La ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha asegurado que será la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, la que lidere la mesa de diálogo social de la reforma laboral, en torno a la que todo el Ejecutivo está alineado. A su juicio será una reforma profunda y estructural que va a mejorar y modernizar las relaciones laborales en España y que no tendrá «nombre propio» sino que será de todo el Gobierno, que contribuirá a enriquecerla con la colaboración de todos los ministerios, incluida la cartera de Economía liderada por la vicepresidenta primera Nadia Calviño.

A este respecto, Calviño ha asegurado que no hay «ningún tipo de inconveniente» en que el Ministerio de Trabajo lidere la mesa de la reforma laboral, aunque ha insistido en la importancia de que haya una «buena coordinación» en el Gobierno ahora que se enfila la «fase decisiva» de la negociación. Ante la polémica entre PSOE y Unidas Podemos sobre la reforma laboral, Calviño ha explicado que «no hay ningún tipo de debate» desde el punto de vista de la «sustancia», sino que se está abordando el «método» para lograr el acuerdo.

«Estamos, sobre todo, hablando de la metodología, sobre cómo vamos a organizarnos de aquí a final de año para lograr ese deseado acuerdo», ha señalado la vicepresidenta durante la clausura la XVIII Jornada Nacional de Periodismo, organizada por la Asociación de Periodistas Europeos.

Búsqueda de consenso

En rueda de prensa al término del Consejo de Ministros, Isabel Rodríguez ha manifestado que la reforma laboral será «una ley de legislatura y una marca de este Gobierno», que quiere hacerla con el máximo consenso y en el marco del diálogo social «antes de que termine el año».

«Se trata de un triple compromiso del Ejecutivo», expresado por el presidente Pedro Sánchez en su discurso de investidura, concretado en el Gobierno de coalición con Unidas Podemos y ratificado por Europa, según Rodríguez.

Acabar con la precariedad

Rodríguez ha insistido en la «absoluta normalidad en las relaciones entre las dos partes del Gobierno de coalición», que está buscando una metodología que facilite que los distintos departamentos puedan participar del diálogo para llegar al objetivo final de la reforma: romper con la precariedad y mejorar la situación de los trabajadoras.

En las últimas semanas, la tensión en el Gobierno de coalición se había visto intensificada por la polémica de quién asumiría el liderazgo en la mesa de diálogo social para una nueva reforma laboral. El PSOE abogaba por la presencia de la vicepresidenta Calviño en la negociación, mientras que desde Unidas Podemos se interpretó esto como una injerencia en las funciones de la ministra de trabajo, Yolanda Díaz. Las declaraciones de Rodríguez parecen zanjar este episodio reafirmando la posición de Díaz en las negociaciones.