El Senado acepta que Bárbara Rey comparezca para explicar la compra de su silencio con fondos reservados
Compromís registró una petición para que la vedette aclare las cantidades que recibió por ocultar sus relaciones con altos cargos del Estado
La actriz Barbara Rey durante su 70 cumpleaños en Madrid. | Sergio R Moreno (Gtres)
El Senado ha aceptado la petición de comparencia de Bárbara Rey realizada por Compromís. La solicitud ha sido remitida este jueves a la Comisión de Interior, que es ahora la encargada de llamar a declarar a la conocida vedette, aunque no está obligada a hacerlo. La fecha y las condiciones la deberán consensuar la Mesa de la comisión, formada por tres miembros del PSOE y dos del PP. La formación valenciana ha realizado esta petición para que la artista explique «la veracidad» de las informaciones publicadas, según las cuales, habría recibido «ingentes cantidades de dinero público de fondos reservados» para que no hiciese públicas sus supuestas relaciones con altos cargos del Estado.
«Es importante que comparezca para que explique estas gravísimas acusaciones, aunque los delitos hayan prescrito. La gente tiene que saber el dinero que ha recibido, porque puede suponer varios delitos muy graves, entre ellos los de prevaricación, cohecho y tráfico de influencias», ha reconocido Carles Mulet, portavoz de Compromís. El senador teme que la Comisión de Interior no llegue a tramitar la comparencia, como denuncia que ocurre, por ejemplo, con la del ministro del ramo, Fernando Grande-Marlaska, solicitada a principios de la legislatura. «Es una comisión que no funciona muy bien. No se toma en serio», se queja Mulet a THE OBJECTIVE.
Bloqueo de la comisión
El bloqueo actual, según fuentes de la Cámara Alta, se da por la falta de actividad de la presidencia de esta comisión, que no ha permitido las comparecencias solicitadas por los grupos. «La persona en cuestión (la socialista María Jesús Castro) ha estado de baja, pero entendemos que hay otras para activar los procedimientos», señala el senador. La petición de Compromís se produjo el lunes de forma telemática. El Senado la admite porque entiende que estaba bien formulada y reunía todos los requisitos, explica Mulet.
La solicitud activa la posibilidad de que María García García, conocida artísticamente como Bárbara Rey, comparezca ante la comisión de Interior del Senado. La intención de la formación valenciana es que explique la veracidad de las informaciones publicadas en diferentes medios de comunicación. Estas noticias señalan que la vedette recibió, supuestamente, «ingentes cantidades de dinero público de fondos reservados y posibles prebendas», como la contratación por parte de una televisión autonómica (Canal 9), para que no hiciese públicas sus supuestas relaciones con altos cargos del Estado.
La solicitud ya figura en la lista de comparecencias formuladas para la Comisión de Interior de la Cámara Alta. Mulet remarca que la petición puede parecer un asunto propio de la prensa rosa, pero «estamos hablando de una enorme malversación de fondos reversados». «Por muy materia de secreto de Estado que sea, no pueden estar destinados nunca a comprar el silencio de la aventuras sexuales del monarca emérito. Su incontinencia sexual no ha costado presuntamente millones de euros de dinero público», ha insistido el senador de Compromís.
«Estamos ante la vergüenza de la irresponsabilidad política de los actos del emérito, de su inviolabilidad e impunidad para delinquir. Esta no es aplicable a sus amigas sexuales o los gestores de los fondos reservados», afirma Mulet. El senador reconoce que «va a ser muy difícil» que la vedette confirme estos supuestos sobornos o cohechos, «pero nuestra obligación es intentar aportar luz y pedir explicaciones». Mulet ya intentó sin éxito en 2017 que el Gobierno contestase sobre el uso de fondo reservados para el pago de favores, silencios y juergas del hoy rey emérito con sus «amigas especiales».
Ese tipo de preguntas, insiste el senador, fueron vetadas entonces por la Mesa del Senado al entender que la figura del monarca no estaba sometida a control parlamentario. Mulet presentó un escrito de reconsideración alegando que la pregunta versaba sobre el uso de fondos reservados y no sobre la figura del Rey, pero tampoco se aceptó esa fórmula. El portavoz de Compromís ha querido dejar claro que esta iniciativa no persigue el sensacionalismo. «Huimos de él. Nos da igual las relaciones que una persona tenga con otra siempre que sean consentidas. Lo que nos preocupa es que estas acaben suponiendo un saqueo del erario público».
