Podemos se alinea con Salvini y Orbán al criticar el envío de armas de la UE a Ucrania
Los morados se muestran contrarios al envío de armas de la UE a la resistencia de Ucrania. El líder de la Liga Norte, Matteo Salvini, defiende la misma posición mientras que el derechista húngaro Víctor Orbán niega el paso por su territorio
Podemos concluyó la importante reunión de la ejecutiva del pasado lunes con un punto clave sobre la mesa. El partido sostiene que la decisión de la Unión Europea (UE) de enviar armas letales a Ucrania ante la invasión rusa «no va en la línea de la distensión». Los morados quieren centrar la atención en la ONU, tal y como adelantó THE OBJECTIVE. Pero ante la acción de la Comisión Europea, han dejado claro que su posición es crítica. Esta postura se alinea con lo que defienden importantes exponentes de la derecha europea, como el italiano Matteo Salvini, quien afirmó el domingo que «es contrario al envío de armas a Ucrania». En Hungría, Víktor Orbán rechaza que las armas de la UE pasen por su territorio.
Las palabras de Salvini generaron un importante revuelo mediático en el Gobierno de Mario Draghi, que ha apostado por la misma vía de la UE y otros países europeos tradicionalmente neutrales como Suecia. «Armas letales, ¿a usted le gusta esta definición? Yo prefiero hablar de corredores humanitarios, de diplomacia. De quien me representa no quiero que la respuesta sea distribuir armas letales. No, en mi nombre armas letales, no», djio el exministro del Interior italiano y exponente de la derecha europea en declaraciones recogidas por Il Corriere della Sera.
Salvini ha matizado que su partido sigue condenando la invasión de Vladimir Putin, y que se mantiene firme en el apoyo al Ejecutvo de Mario Draghi. Pero ha obligado a Draghi a intervenir, reiterando el «firme apoyo» de Italia a la UE en su política. Hace cuatro días, Draghi dijo estar dispuesto a enviar 3.400 militares en los países cercanos a Ucrania en el marco de la OTAN. Y el domingo respaldó las sanciones contra Rusia. En Ucrania ya se contabilizan más de 350 víctimas civiles.
Salvini perdió su ministerio tras una crisis de gobierno en 2019 que se activó después de que el diario digital BuzzFeed descubriera que miembros de su entorno habían tomado contacto con representantes del Gobierno de Putin. Estados Unidos sospechó que el partido de Salvini estaba buscando apoyo logístico y financiero del Kremlin. A finales de 2019, Salvini pidió un adelanto electoral, pero los izquierdistas del Partido Democrático intervinieron para garantizar su apoyo al expresidente del Gobierno, Giuseppe Conte. Con la pandemia, Draghi se hizo con el Ejecutivo gracias a un apoyo transversal de todas las fuerzas políticas, incluida la Liga Norte que ahora cuestiona el envío de armas a Ucrania.
«Aumentar la escalada bélica»
La cúpula de Podemos estudió la cuestión en la mañana del lunes durante su ejecutiva. Y la decisión tomada por Ione Belarra e Irene Montero ha ido en la dirección de desmarcarse del envío de dichas armas a Ucrania. Podemos entiende que esta operación puede desencadenar una «espiral peligrosa», que asocian también a la decisión de la UE de vetar a los medios de comunicación rusos que responden al Kremlin. Los morados buscan cuadrar el círculo ante presiones de sus bases, que insisten que culpar a la OTAN del desenlace del conflicto.
El coportavoz estatal de la formación morada, Javier Sánchez Serna, afirmó el lunes que «no se puede hacer la guerra en nombre de la paz», criticando el envío de armas pagadas con fondos comunitarios para «aumentar la escalada bélica». Podemos prefiere hablar del envío de material médicos y defensivo. Con sus declaraciones, los morados intentan fijar algo parecido a una línea roja para Sánchez, en la que aspiran a sumar a los partidos nacionalistas con los que crear un bloque de unos 60 diputados, según ha podido saber THE OBJECTIVE.
El partido de Montero y Belarra habló en los primeros días de la invasión de fortalecer el protagonismo de la UE en la crisis. Pero ahora se descuelga de lo pactado en Bruselas, e insiste en centrar todo tipo de operativo en el marco de las Naciones Unidas.
Escepticismo sobre las sanciones
Podemos también ha estudiado el efecto que pueden tener las sanciones europeas contra Rusia. Y también en este caso varios miembros del partido muestran su escepticismo. Pero de momento Podemos cree que el presidente Sánchez se está alineando con sus posiciones, algo que celebran a pesar de que ha empezado a lograr cierto protagonismo la ministra Margarita Robles, que en Podemos consideran del ala contraria a la presencia de ministros morados en el Consejo de Gobierno. Podemos prefiere en este sentido hablar de sanciones contra los «oligarcas», para evitar una crisis económica en Rusia que acabe afectando a la población civil.
La UE, sin embargo, ha tomado su decisión. «Vamos a suministrar armas e incluso aviones de combate. No estamos hablando solo de municiones, estamos proporcionando las armas más importantes para ir a la guerra», ha afirmado el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell. La UE ha acordado destinar 450 millones de euros del presupuesto comunitario para ofrecer armas a los resistentes de Ucrania.
El envío responde a lo pedido por el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dimitro Kuleba, para afrontar la ofensiva de Rusia. «La UE es un proyecto de paz, queremos conservar paz en Europa pero hay que estar preparados para defender esa paz», afirmó el Alto Representante de Política Exterior de la UE, Josep Borrell, el domingo en Bruselas tras una videoconferencia con los ministros de Exteriores de la UE. Esta política sin embargo encuentra la crítica de Podemos, que cogobierna con Pedro Sánchez desde hace dos años, y también de otros partidos europeos, en las antípodas ideológicas de los morados, como el de Matteo Salvini en Italia.
Mientras que el Gobierno de Hungría anunciaba en la tarde del pasado lunes que no permitirá que las armas pasen por su territorio. «Hungría no enviará soldados ni armas a Ucrania, y tampoco permitirá que se transporten armas letales a través del país», dijo el ministro de Exteriores Péter Szijjártó. El Gobierno de Hungría está controlado por Viktor Orbán, uno de los afines derechista a Salvini y considerado uno de los mejores aliados de Moscú en la OTAN. Cabe señalar que tanto Orbán como Salvini han condenado la invasión de Rusia en Ucrania, pero no quieren oír de envío de armas para la resistencia ucraniana.