El periodista acusado de espionaje en Polonia tiene doble identidad desde hace 30 años
El libro de familia expedido por el Registro Civil de España en 1991 explica por qué Pablo González tiene nombres distintos en sus pasaportes español y ruso
Pablo González, el periodista español detenido en Polonia por presunto espionaje para Rusia, dispone de doble identidad desde que tenía apenas nueve años de edad. Hijo de una española y de un ciudadano ruso, nació en Moscú en el año 1982 con el nombre de Pavel Rubtsov. Es el apellido de su padre, Alexei E. Rubtsov. Sin embargo, sus padres se divorciaron cuando era pequeño y se mudó con su madre a Bilbao en 1991. Al llegar a España, su progenitora, María Elena González, de conformidad con el artículo 15 del Código Civil y tras exhibir el certificado de divorcio, le inscribió en el Registro Civil con nombre español y los apellidos de la familia materna.
Así consta en el libro de familia expedido por el Registro Civil del Consulado de España en Moscú el 21 de noviembre de 1991, al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. Un documento que explica por qué Pablo González, con doble nacionalidad, tiene nombres distintos en su pasaporte español y en su pasaporte ruso. Precisamente esta doble identidad sería uno de los motivos por el que las autoridades de Polonia detuvieron el pasado 28 de febrero al periodista, acusándole de ser un espía ruso, cuando se disponía a cruzar la frontera con Ucrania para cubrir la invasión rusa en ese país como colaborador de La Sexta y el diario Publico.es.
Si bien es cierto que difieren los nombres de su pasaporte ruso y el español, los datos relativos a la fecha y lugar de nacimiento coinciden en ambos: 28 de abril de 1982 en Moscú. El abuelo de Pablo, Andrés González Yagüe, acabó en la URSS cuando era niño por la Guerra Civil. En Moscú nació también la madre del periodista ahora encarcelado en Polonia. Y allí residió hasta que decidió mudarse con su hijo a España tras la caída del muro de Berlín. En Bilbao creció. Después de licenciarse en Periodismo hizo el Máster de Periodismo Multimedia del diario vasco El Correo y desde 2014 se ha trasladado en varias ocasiones a la región ucraniana del Donbás como periodista freelance para cubrir el conflicto en esa región, según fuentes cercanas a la familia.
Encarcelado por espionaje hasta el 29 de mayo
Desde su detención en Polonia, Pablo González se encuentra a disposición de la Fiscalía de Rzeszów y ha sido trasladado a un centro penitenciario de esa región polaca. Un Tribunal Regional dictó el pasado 2 de marzo un auto, al que ha tenido acceso este diario, en el que informa de su decisión de privar de su libertad al periodista español por presunto espionaje hasta el próximo 29 de mayo. Durante tres meses permanecerá encarcelado.
En el escrito, el Tribunal Regional de Rzeszów identifica al periodista español Pablo González como acusado de espiar para Rusia con los alias «Pavel Rubtsov» y «Aleksey Rubtsov». Este último coincide con el nombre de su padre. Las autoridades polacas le acusan de ser un agente de la Dirección Principal de Inteligencia del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa (GRU). «Realizó operaciones en beneficio de Rusia, beneficiándose de su condición de periodista, lo que le permitió viajar libremente por el mundo y Europa, incluyendo zonas de conflicto militar y territorios marcados por tensiones políticas», asegura el Gobierno polaco.
Polonia ha nombrado una segunda abogada de oficio para defender a González. Su abogado en España, Gonzalo Boyé, afirma que ni esa letrada ni el anterior abogado de oficio designado por las autoridades polacas se han puesto en contacto con él. El periodista español sigue incomunicado desde su arresto.
El Gobierno rehúsa criticar a Polonia
Pablo González fue detenido por las autoridades polacas mientras cubría desde la localidad de Rzeszow, en las cercanías de la frontera con Ucrania, acusado de ser «prorruso». El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, confirmó este miércoles que la acusación de espiar para Rusia que pesa sobre el periodista español es «muy grave» y que serán los tribunales de ese país los que tendrán que tomar una decisión al respecto.
Así se pronunció el ministro en la Comisión de Exteriores del Congreso, después de que el diputado de EH Bildu Jon Iñarritu le preguntase sobre la situación de González. El diputado vasco ha denunciado que su familia y su abogado llevan sin poder contactar con él desde el día de su arresto. Ante lo que considera una actuación «irregular», Iñarritu ha pedido al Gobierno que denuncie «lo que está haciendo la Fiscalía en Polonia» porque es «un verdadero escándalo».
Sin embargo, Albares evitó criticar a Polonia y se limitó a señalar que González está acusado de espionaje y ha recibido toda la atención que le ha podido prestar el consulado desde que fue detenido. De acuerdo al ministro de Exteriores, el periodista recibió una visita consular y el cónsul está en contacto vía correo electrónico con su abogado privado y su familia. Añadió que la comunicación entre la abogada de oficio asignada por las autoridades polacas y su representante legal en España «es complicada» por el idioma. No obstante, Albares se comprometió a llamar de nuevo a su homólogo polaco, con quien ya se ha reunido dos veces para interesarse sobre la situación de González.