Aparece en Ucrania un fusil de francotirador similar al del cuerpo de élite del Ejército del Aire
El rifle de precisión se asemeja al que utiliza el Escuadrón de Zapadores Paracaidistas con sede en Alcantarilla (Murcia)
Un fusil de precisión similar al que utiliza el Escuadrón de Zapadores Paracaidistas (Ezapac), las fuerzas especiales del Ejército del Aire, ha aparecido en manos de los voluntarios españoles que luchan contra Rusia dentro de la legión extranjera ucraniana, según las imágenes distribuidas este viernes en canales de información vinculados a Kiev en los que se identificaba la fotografía con el siguiente mensaje: «Arma perteneciente a una unidad paracaidista española y actualmente en manos de tropas ucranianas».
El modelo es un Barrett M107A1 semiautomático del calibre 50 y lleva consigo un parche paracaidista como el que se utiliza en el Ejército del Aire y que portan los miembros del grupo TangoSpain. Con estos rifles de fabricación estadounidense se puede alcanzar un sistema de armas o un vehículo a más de un kilómetro de distancia y atravesar su blindaje, según un reciente reportaje en La Razón.
El fusil que ha aparecido en Ucrania es de color árido e incluye un cargador extraíble en el que caben diez municiones, mira telescópica, así como equipo de limpieza y mantenimiento. Todo ello dentro de la propia maleta de transporte. Este arma de precisión para francotiradores fue adquirido por el Ejército del Aire en 2018 para su unidad de élite. «Son un buen recurso para poder aplicar en determinados despliegues donde hay riesgo de enfrentamiento con el adversario», se señala en la web especializada Defensa.com.
Las armas a Ucrania están «en perfecto estado»
Al margen de la procedencia del arma, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha insistido en las últimas semanas que el material enviado a Ucrania está «en perfecto estado de funcionamiento», sobre todo tras unas informaciones en medios de comunicación, así como en las redes sociales, en las que se indicó que las ametralladoras ligeras enviadas por España a Ucrania podrían ser las Ameli almacenadas desde hace años en el polvorín militar de Chinchilla (Albacete).
Varios lotes de estas ametralladoras salieron defectuosos, por lo que el Ejército de Tierra decidió retirarlos hace más de una década cuando llegaron los HK-MG4. Desde entonces, las Ameli se han utilizado en ejercicios de tiro de corta distancia -unos 50 metros-, pero no en ejercicios de combate ni en misiones internacionales. Por eso Robles quiso dejar claro en su última comparecencia en el Congreso de los Diputados que estas armas no se han enviado a Ucrania.