Funcionarios exigen a Marlaska el cese del director de la prisión de Valdemoro
Los sindicatos convocan una protesta ante la sede de Interior para exigir su destitución. Acusó sin pruebas a cuatro funcionarios que acabaron absueltos
La Agrupación de Cuerpos de Administración Penitenciaria exigen a Fernando Grande-Marlaska, ministro de Interior, el cese del director de la prisión de Valdemoro, Antonio Luis de la Iglesia, por haber acusado sin pruebas a cuatro funcionarios de los delitos de banda organizada, tráfico de drogas, cohecho prevaricación y omisión del deber. Un caso revelado por THE OBJECTIVE que ha provocado que funcionarios del sector levanten la voz contra «la criminalización de los trabajadores y la antidemocracia en las prisiones».
La dirección de la prisión, dentro de la ‘Operación Orión, implicó a cuatro funcionarios del Centro Penitenciario Madrid III en la fuga de dos presos y presentó cargos por los que tres de los funcionarios pasaron cuatro meses y medio encarcelados. Sin embargo, los cuatro quedaron absueltos el pasado 22 de marzo después de que la Guardia Civil, la Fiscalía y los juzgados de Instrucción número 4 y 7 de Valdemoro concluyeran que no había pruebas que acreditasen los delitos que la dirección de la cárcel les imputaba.
«La dirección del centro penitenciario, lejos de asumir la responsabilidad que conlleva confiar en su plantilla, se dedica de la forma más torticera y maquiavélica posible, a inventar tramas delictivas en las que de forma absolutamente artificiosa crean situaciones que dan la apariencia de que los funcionarios del centro incurren en conductas tipificadas como delitos en sus relaciones con los internos», se puede leer en el escrito difundido, donde convocan una manifestación para el próximo día 31 de mayo frente a la sede del Ministerio del Interior, secundada por las secciones sindicales de ACAIP-UGT, APFP, CCOO y CSIF.
«¿Pero dónde está la cámara oculta?»
Las declaraciones en sede judicial de estos tres funcionarios a las que tuvo acceso THE OBJECTIVE desmontan prácticamente por completo la investigación que había llevado a cabo la Guardia Civil y por la que la magistrada los había mantenido en prisión provisional.
Los testigos afirmaron «no haber presenciado nada», «haber escuchado de oídas» e incluso que los investigadores «habían puesto en su boca palabras que no habían dicho». Ante estos testimonios, la perplejidad de los letrados y la jueza es tal que incluso esta última, según puede apreciarse en las grabaciones, llega a decir: «¿Pero dónde está la cámara oculta?».
«Estos vídeos muestran la indignación, el enfado e incluso el sonrojo que esta presunta trama absolutamente engañosa y sin contenido algo, producían en la Jueza y en el Ministerio Fiscal», se lee en el comunicado, donde también denuncian la «huida» de compañeros debido a que «nadie quiere trabajar bajo dirección de la persona que ostenta este cargo en el CP Madrid III». «Trabajar en Valdemoro es indeseable para el colectivo de los empleados de prisiones. Lo único que este colectivo tiene en la cabeza es ¿qué será lo siguiente? ¿a quién le tocará?», concluyen.