Mayor Oreja une a PP y Vox en una protesta contra los pactos de Sánchez con Bildu
La plataforma NEOS convoca este viernes una manifestación a las puertas del Congreso a la que acudirán representantes del partido de Feijóo y Abascal.
El exministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, participa en una manifestación reciente. | Ricardo Rubio (Europa Press)
Jaime Mayor Oreja fundó NEOS el pasado mes de noviembre con el objetivo de unir a la derecha sociológica y política a través de una plataforma ciudadana que defendiera los valores cristianos y constitucionales ante el «plan de ruptura» que enarbola, en su opinión, el Gobierno de Pedro Sánchez. Lo está logrando. Lo consiguió en la manifestación provida celebrada en Madrid el pasado 26 de junio, donde hubo representantes de Partido Popular y Vox, y lo logrará este viernes a las puertas del Congreso de los Diputados.
La plataforma coordinada por el exministro del Interior y la histórica dirigente del PP en el País Vasco, María San Gil, ha convocado a las 11.30 horas a la sociedad civil ante la sede de la soberanía nacional para protestar por la nueva Ley de Memoria Democrática pactada entre PSOE y Unidas Podemos con EH Bildu, así como por el uso «perverso», dicen, que el Gobierno está haciendo del 25 aniversario de la muerte de Miguel Ángel Blanco. A ella acudirán víctimas del terrorismo (como José Antonio Ortega Lara), las asociaciones que las representan y, según ha podido saber THE OBJECTIVE, distintos políticos de la derecha.
El acto, tal y como lo presentan los convocantes, es una «protesta por el desprecio y afrenta a la Verdad, Justicia, Dignidad y Memoria de las Víctimas que representa la estrategia de blanqueo del Gobierno que asistirá al acto del aniversario en Ermua después de acordar la nueva Ley de Memoria Democrática con Bildu-ETA». En conversación con este medio, se dicen «indignados» ante «la infamia en la que vive instalado Pedro Sánchez, que ha soliviantado hasta a exdirigentes socialistas».
Y es que conviene recordar que a la polémica suscitada por el acuerdo alcanzado para la ley de memoria con la extrema izquierda abertzale se le ha sumado al veto inicial denunciado por Mari Mar Blanco, hermana del concejal popular asesinado por la banda terrorista, por parte del alcalde socialista de Ermua para impedir que intervenga en el acto de homenaje que se celebra el próximo miércoles en la localidad -aunque finalmente rectificó-. También la negativa del PSOE de Arganda del Rey, donde los socialistas gobiernan en mayoría, a otorgar el nombre de una de las plazas del municipio madrileño a una de los víctimas más reconocibles de la banda terrorista.
Esto ha provocado que PP, Vox y la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) vayan a excusar su presencia de un homenaje que, consideran, solo sirve para blanquear a la coalición que lidera Arnaldo Otegi. Sí concurrirán juntos a la convocatoria de NEOS en una imagen que, de un tiempo a esta parte, es infrecuente: la de miembros de PP y Vox en manifestaciones públicas. Al menos desde la famosa foto de Colón que, en febrero de 2019, juntó a Pablo Casado y Santiago Abascal con Albert Rivera (Ciudadanos) para protestar contra las cesiones de Sánchez ante los separatistas, así como para exigirle que convocara elecciones. Desde entonces, ambas formaciones solo se han dejado ver juntos, que no revueltos, en aquel mítico enclave madrileño.
Lo hicieron en la concentración constitucionalista celebrada en junio de 2021, cuando decenas de miles de personas se manifestaron contra los indultos del Gobierno a los líderes separatistas del procés. En aquella ocasión, Casado y Abascal evitaron fotografiarse juntos. Pero sí coincidieron escudándose en que la convocatoria había sido realizada por la plataforma Unión 78.
Lo hicieron, también, el pasado 26 de junio en la gran concentración provida (contra el aborto y la eutanasia) convocada, precisamente, por NEOS, aunque es cierto que fue Vox quien se volcó en el acto con la presencia de Santiago Abascal, Rocío Monasterio, Iván Espinosa de los Monteros o Jorge Buxadé. Por otro lado, en representación del PP acudieron la presidenta de Nuevas Generaciones, Bea Fanjul, o el secretario general de Isabel Díaz Ayuso, Alfonso Serrano. Nombres de menor entidad.
Ese es el mismo pretexto que usarán ahora los populares y voxeros para coincidir en una concentración a las puertas del Congreso en la que no estarán, previsiblemente, ni Abascal ni Feijóo. El sucesor de Pablo Casado al frente del PP ha seguido hasta ahora la estrategia tanto discursiva como política de ignorar al partido a su derecha para evitar que la izquierda le achaque su asociación a lo que en su argumentario es la «extrema derecha». Una estrategia que no corre el riesgo de desviarse este viernes por cuanto, como zanjan fuentes de NEOS, esta es una «movilización de la sociedad civil a la que puede sumarse quien quiera».
