Iglesias desvela presiones para que Yolanda Díaz y el PSOE acudan juntos a las generales
El exlíder morado aprovecha una reflexión sobre las elecciones en Italia para advertir de una coalición entre Sumar y el PSOE como «voto útil» contra el PP
El exlíder de Podemos Pablo Iglesias ha avisado a sus seguidores que de aquí a 2023 la ministra Yolanda Díaz recibirá presiones para que Sumar entre en una coalición con el PSOE. Iglesias centra su reflexión en aquellos que apelarán al «voto útil» en las próximas elecciones generales, puesto que «intentarán convencer a Sumar de que se presente en coalición con el PSOE». Iglesias ha hablado de esta posibilidad en un editorial de su programa La Base, dando voz a una sospecha que circula entre las filas del partido morado.
Según Iglesias, la derecha en Italia, liderada por Giorgia Meloni en un pacto con Matteo Salvini y Silvio Berlusconi, representa una opción de corte «fascista» que aprovecha las instituciones liberales para alcanzar el poder. Iglesias reprocha a la prensa progresista española que da voz a esos representantes políticos, a la vez que advierte sobre el escenario electoral en España de aquí a las próximas elecciones generales. Ante la posibilidad de una coalición entre Sumar y el PSOE, cierra su reflexión con un lacónico comentario: «Se pueden ir yendo ya un poquito a la mierda».
Iglesias recupera en su editorial una reflexión que ya debaten varios cuadros del partido morado, tal y como ha podido comprobar THE OBJECTIVE desde al menos antes del verano. Los vaivenes y retrasos de Yolanda Díaz en la construcción de Sumar preocupan a la cúpula de Podemos. Los de Ione Belarra e Irene Montero han trasladado en más de una ocasión a Díaz que debe acelerar su proyecto. Todo el tiempo perdido, sostienen, se convierte en «ruido mediático» que afecta a la estabilidad de Unidas Podemos en el Gobierno de Pedro Sánchez.
Los dardos de Díaz
La situación es de máxima tensión. Como ya desvelaba este diario, las relaciones entre el exvicepresidente y la política gallega son más que mejorables. Los continuos dardos lanzados por Díaz ponen de los nervios al círculo de Iglesias. Mientras que en el frente yolandista reprochan al ex secretario general insistir en marcar la agenda política, sea en su tertulia del lunes en la Cadena Ser (que las fuentes consultadas aseguran que Díaz y sus asesores escuchan religiosamente) o en el podcast La Base, que está teniendo un considerable éxito de audiencia.
Díaz ha anunciado que Sumar no se presentará con su marca en las elecciones municipales y autonómicas de 2023. Las fuentes consultadas hablan de un planteamiento dirigido a ganar tiempo, intentando construir los «equipos» necesarios para la construcción de la plataforma, y desgastar Podemos demostrando que su marca ha llegado a un «fin de ciclo».
Los morados, por su parte, no están dispuestos a ceder. Todas las fuentes consultadas aseguran que Podemos «no se va a diluir» en Sumar y que su proyecto consiste en forzar a Díaz a incluir a sus dirigentes en las próximas listas electorales. Aunque también comentan la posibilidad de un golpe de efecto de cara a las generales.
¿Qué haría Podemos?
La incógnita de Podemos atañe a lo que Díaz pueda hacer en un contexto de debilidad de la izquierda. Si Díaz, por ejemplo, se decanta por una coalición electoral con el PSOE para frenar la escalada del PP y Vox, apelando por ejemplo al «voto útil», ¿qué haría Podemos?
La tentación de los morados puede ser revalidar un puñado de escaños en las grandes ciudades con tal de torpedear hasta el final del proyecto de Díaz. Esta opción no se puede descartar. Pero también existe la posibilidad de un frente común de izquierdas en el que, si Podemos no entra, se le tachará de «traidor». Se trataría, en este caso, de un efecto bumerán con respecto a lo que Podemos ya está planificando de cara a las municipales y autonómicas de Madrid, tal y como adelantó este diario.
Las fuentes consultadas creen que más allá de las declaraciones de Iglesias es «casi imposible» que Díaz acabe sellando una coalición con el PSOE. Los socialistas recuerdan el fracaso el pacto entre Joaquín Almunia y Paco Frutos en el 2000, pero a nadie se le escapa que, quien hace y deshace en el partido, es el presidente Sánchez. Él y solo él decidirá lo qué es bueno y malo para el PSOE.
Coalición con grupos propios en el Congreso
Es por eso que nadie excluye nada. Sánchez podría renunciar a algunos puestos de salida con tal de contar con Sumar (Díaz sigue destacando como una de las ministras mejor valoradas en los sondeos). Esto no implicaría trabajar en el Congreso en un mismo grupo parlamentario. Es decir, que de llegar a un acuerdo el PSOE y Sumar, podría mantenerse en un esquema de coalición instrumental, salvaguardando en el Congreso sus propios grupos y fondos.
El planteamiento está tan comentado que algunos dirigentes territoriales de Podemos esbozan incluso la posibilidad de que el partido morado se sume a ello, en las condiciones mencionadas antes. Una opción que, sin embargo, Iglesias ha querido desmentir antes de tiempo.
Las frases de Iglesias, no obstante, solo pueden sonar a desafío a Díaz. Un capítulo más en el choque entre dos dirigentes que hace un año se prometían amistad y fidelidad. Ahora todo ha cambiado. E Iglesias ya prepara a los suyos para un choque jugado más en la pureza que en la cesión de protagonismo a favor de Díaz. Iglesias ha vuelto de Italia más batallero que nunca: «Se pueden ir yendo ya un poquito a la mierda», avisó el lunes.