Aragonès monta un gobierno multicolor con consejeros de CDC, PSC y Comunes
Las nuevas incorporaciones cubrirán las vacantes que dejaron sus siete predecesores de JxCat tras decidir el pasado viernes dejar el Govern
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. | Lorena Sopeña (Europa Press)
El presidente catalán, Pere Aragonès, incorporará a su Govern a siete consellers tras la salida de JxCat del gobierno autonómico el pasado viernes. Los nuevos consellers serán Carles Campuzano (ex de CDC), que ocupará el cargo en Derechos Sociales; Joaquim Nadal (ex del PSC) en Investigación y Universidades, Gemma Ubasart (ex de Podem) en Justicia, Derechos y Memoria, Manel Balcells en Salud, Natàlia Mas en Economía y Hacienda, Meritxell Serret en Acción Exterior y Juli Fernández en Territorio.
Los nombres los ha anunciado el Govern en un comunicado, en el que ha informado que Aragonès mantiene la estructura de 14 departamentos, aunque sí habrá algunos cambios.
No habrá vicepresidencia, sino que la consellera de la Presidencia, Laura Vilagrà, ejercerá como número dos del Govern, asumiendo tareas de coordinación y nuevas áreas como la gestión de todas las delegaciones del ejecutivo en el territorio, además del ámbito de procesos electorales.
Los nuevos consellers, que está previsto que tomen posesión el próximo martes a las nueve de la mañana, cubrirán las vacantes que dejaron sus siete predecesores de JxCat tras decidir el pasado viernes dejar el Govern. Aragonès ha tardado apenas 48 horas en anunciar su nuevo Govern, tras una reunión con su equipo en el Palau de la Generalitat.
«Cataluña tendrá un gobierno de país. Un gobierno para Cataluña entera, que representará los consensos del 80% de la ciudadanía. Y que trabajará siempre al servicio de la gente y lo dará todo. Por una Cataluña próspera, justa y libre», ha dicho Aragonès en un mensaje de Twitter al poco de dar a conocer la noticia.
Tras el anuncio del nuevo Govern, la presidenta de Junts, Laura Borràs, ha rechazado la renovación y le ha dicho a Aragonès: «Le esperamos en el Parlament o en las urnas».
Ha denunciado en un tuit que la nueva propuesta de Ejecutivo, tras la salida de Junts, «no ha pasado ni por el Parlamento ni por las urnas. Sin esta validación no tiene legitimidad política ni tampoco democrática». «La coherencia tiene que ser el principal capital político de los gobernantes», ha añadido.
Por otra parte, Jordi Turull ha retado a Aragonès a comprobar si su Govern dispone del «consenso del 80%» del Parlament, una alusión a que se someta a una cuestión de confianza.
Poco antes de conocerse la remodelación, la presidenta de En Comú Podem en el Parlament, Jéssica Albiach, ha alertado a Aragonès: si pretende gobernar solo con la fuerza de ERC, su Govern «nace muerto y, por tanto, no podrá contar con el apoyo» de los comunes.
