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El independentismo busca «víctimas del 1-O» para incriminar a policías y guardias civiles

Un agente de la Policía Nacional se enfrenta a una pena de cárcel por la cargas del 1-O. La acusación popular critica que de momento no ha habido «condenas»

El independentismo busca «víctimas del 1-O» para incriminar a policías y guardias civiles

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El independentismo ha hecho un llamamiento para que las «víctimas de la violencia policial» del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 se den a conocer y así reforzar las denuncias contra los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil que intervinieron en esa jornada para garantizar el orden constitucional. Las entidades Írida, Òmnium Cultural y la Assemblea Nacional Catalana (ANC) están detrás de esta iniciativa que tiene como objetivo que se produzca la primera «condena» contra policías y guardias civiles que actuaron en colegios electorales de Barcelona.

Cinco años después de la votación declarada ilegal por el Tribunal Constitucional, no se ha dictado ninguna condena contra agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Estas entidades, con Íridia a la cabeza, han logrado que decenas de policías y guardias civiles fueran imputados por los hechos del 1-O. No obstante, hasta ahora la Justicia siempre ha fallado que actuaron de forma proporcional y acorde al mandato judicial.

Acusación popular

En el formulario donde las presuntas víctimas pueden inscribirse, y al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, admiten que se «acerca la fase decisiva del juicio contra la violencia policial en Barcelona» y piden a los ciudadanos hacer un paso al frente para «plantear el juicio de forma colectiva».

Formulario del independentismo para las «víctimas» del 1-O

Las tres entidades ejercen de acusación popular en muchos de estos procedimientos que se dirimen en los juzgados de Barcelona. Las fuentes jurídicas consultadas por este medio explican que está a punto de terminar la fase de instrucción, relativa a la investigación y recolección de pruebas. El próximo paso es la apertura de la fase de juicio oral, que es cuando las acusaciones y defensas presentan los escritos de calificación provisionales hasta que se celebra la vista oral.

¿1.000 heridos?

En su llamamiento, también dan por buena la cifra de 1.066 víctimas que registró el Servei Català de Salut, aunque en aquella jornada y las sucesivas no se produjeron ingresos hospitalarios.

Como admitió la Generalitat, se computó como víctima a cualquier persona que requiriese de asistencia telefónica. Incluso en el supuesto que no vivieran en primera personas las cargas policiales, pero que se hubieran sentido impactados por las imágenes y vídeos de la intervención policial.

«Un ejemplo de que no hubo víctimas es que el president Carles Puigdemont no desfiló por hospitales para visitar a los heridos. Porque no los hubo», explica otra fuente consultada por este periódico. El caso más grave que se vivió en aquella votación fue el del músico Roger Español, que perdió un ojo por una bala de goma. Y el de Enric Sirvent, que sufrió un infarto en un colegio electoral de Lérida, y murió en 2020 a causa de la covid-19. Su familia ha mantenido la causa.

Un agente, en riesgo de entrar a la cárcel

Òmnium, que ejerce de acusación popular en el caso de Sirvent, pide tres años de cárcel para el agente involucrado. Es el único procedimiento judicial donde un policía se enfrenta a una pena de cárcel por el 1-O. Hasta ahora el resto de policías y guardias civiles que han ido a juicio fueron acusados por un delito de faltas leves. La acusación popular de Òmnium le atribuye al agente en cuestión un delito de lesiones por motivaciones ideológicas.

El juzgado de instrucción de Lérida ha dictado en dos ocasiones el archivo de la causa, con el apoyo de la Abogacía del Estado y Fiscalía. Pero la Audiencia provincial se ha opuesto en ambas ocasiones a archivar el caso.

Capsulitis en lugar de dedos rotos

Marta Torrecillas, otras de las ‘víctimas’ del 1-O que más notoriedad alcanzó en las redes sociales, acabó matizando el alcance de su lesión. La mujer afirmó que le habían «roto los dedos uno a uno», pero solo sufrió una especie de capsulitis en un dedo.

El gran grueso de la intervención policial se paralizó a media jornada, y en la tarde de la votación no se produjeron altercados. El Gobierno de Mariano Rajoy consideró que la actuación de la mañana fue suficiente para que desde la comunidad internacional no se pudiera dar por bueno el resultado del referéndum.

Encuentro de las «víctimas»

Este miércoles 26 de octubre, Írida, Òmnium Cultural y la ANC celebran su primer encuentro en Barcelona con un centenar de «víctimas» con el fin de elaborar una estrategia conjunta. Los abogados participarán en la reunión para informar de la fase en que se encuentra el proceso judicial así como de los delitos que se les imputa a los agentes.

Su objetivo es que esta primera reunión sirva para que más ciudadanos anónimos se apunten a denunciar sus casos. Aunque esta iniciativa se ciñe a los juzgados de Barcelona, en varios puntos del territorio catalán también existen causas abiertas contra policías y con estas entidades como parte de la acusación.

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