La defensa del 'caso Arandina' presentará incidente de nulidad ante el Supremo
Es el paso previo a posteriores recursos ante el Tribunal Constitucional y el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo
La defensa de Víctor Rodríguez, uno de los futbolistas del caso Arandina, condenado a nueve años y un día de prisión como autor de una agresión sexual a una menor de 16 años, ha advertido de que no da por cerrado el caso y ha anunciado la interposición de un incidente de nulidad ante el Tribunal Supremo, como paso previo a posteriores recursos ante el Tribunal Constitucional y el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo.
La defensa, en declaraciones a la Agencia EFE, ha considerado que, a falta de analizar con detenimiento la sentencia del Supremo, que aún no se ha emitido, el resultado no les parece justo.
Entre otros aspectos, ha indicado que hay numerosas cuestiones a clarificar, como por qué se atiende la petición de la Fiscalía pero sin aplicar los atenuantes o por qué no se atiende la declaración del cuarto futbolista en el que ocurrieron los hechos y que en todo momento ha negado que hubiera pasado nada.
Y recuerda el voto particular emitido por el magistrado Ángel Luis Hurtado, que ha entendido que se debió mantener la atenuante analógica que ya aplicó el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.
El primer paso, ha explicado, será el recurso de nulidad que con su resolución pondrá fin al proceso judicial y cuya interposición es imprescindible para poder acudir al Constitucional. Una vez se pronuncie este tribunal, aún quedaría la posibilidad de acudir a Estrasburgo, vía a la que la defensa está dispuesta a llegar.
Sin querer entrar en plazos concretos, el letrado ha reconocido que aunque la vía judicial se finiquite con el proceso de nulidad, el caso podría prolongarse. No obstante, ha puntualizado que la resolución podría llegar con su cliente ya en prisión puesto que el Constitucional no interrumpe la ejecución de las penas y cuando venza lo del Supremo se dará traslado al tribunal juzgador, Burgos, quien a su vez abrirá pena de ejecución y dará plazo para que los condenados entren en prisión de forma voluntaria.