Marlaska no convence a Podemos, que pide reactivar la comisión sobre la valla de Melilla
Los morados han defendido la necesidad de conocer lo sucedido y han pedido que el ministro acepte lo que sucedió
El presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos en el Congreso, Jaume Asens. | Eduardo Parra (Europa Press)
El presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos en el Congreso, Jaume Asens, ha tildado de «decepcionante» la comparecencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, sobre la tragedia de Melilla del pasado y defiende la necesidad de que los grupos que reclaman una comisión de investigación en la cámara reclamen que se le ponga fecha a su debate en el Pleno.
También ha defendido que la titular de Igualdad, Irene Montero, utilizó un término «sociológico» al aludir a la «cultura de la violación» para acusar a los populares de fomentarla a raíz de campañas institucionales sobre violencia sexual, y que esa expresión debe ser utilizada en la cámara.
«Ayer mucha gente no conocía el significado de este concepto y hoy mucha gente lo conoce», ha reseñado el dirigente de En Comú Podem en los pasillos del Congreso, quien en cambio ha criticado que desde la Mesa del Congreso se prohíba usar el término «fascismo» y reprochar que no pone reglas claras para desplegar el debate parlamentario.
Podemos duda de Marlaska
En el caso de las explicaciones del titular de Interior, que reiteró ayer que no hubo muertos en suelo español, Asens se ha mostrado crítico con Marlaska, en línea con otros socios parlamentarios del Ejecutivo, y ha definido de decepcionante su intervención.
Así, ha deslizado que su grupo es favorable a reactivar de nuevo la solicitud de comisión de investigación sobre la muerte de migrantes en la valla fronteriza de Melilla, que barajan formaciones aliadas del Ejecutivo.
Precisamente ayer el dirigente del grupo confederal instó al ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, a dejar de «echar balones fuera» sobre este suceso y rectificar la versión inicial dada por su departamento, dado que está en juego su futuro político.
«Marlaska debe aceptar la dura realidad de lo que sucedió en Melilla o la dura realidad acabará con Marlaska», lanzó en declaraciones a RNE.
