Sánchez y Feijóo se echan en cara sedición y aborto en busca de votos ajenos y la mayoría
El líder del PP pide el apoyo a los socialistas descontentos con el ‘sanchismo’ y el secretario general del PSOE, el respaldo de los que quieran mejoras sociales
Feijóo ha llamado a los suyos a vencer, no a empatar, al tiempo que ha recalcado que el PP no quiere liderar "ningún bloque de partidos". | Europa Press
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ya están volcados en la precampaña electoral -a poco más de cuatro meses de las elecciones locales de mayo- y se han lanzado a la busca de votos ajenos que les permitan mayorías sin necesitar apoyos externos que condicionen sus políticas.
Tanto Sánchez como Feijóo, en dos actos paralelos, en los que el primero ha acudido a Sevilla a apoyar a sus candidatos y el segundo se ha desplazado a Zaragoza para presentar su terna de aspirantes a las elecciones autonómicas y municipales, no han escatimado en críticas. Han sacado ante su público los temas más polémicos de su adversario, como el plan antiaborto de Castilla y León o la reforma del Código Penal, que rebaja el delito de malversación y sedición.
Ambos están dispuestos a pescar votos en los caladeros ajenos, Feijóo entre los socialistas moderados, «que en el caso de que ahora se volviese a votar la Constitución votarían sí» y Sánchez apelando al respaldo de los ciudadanos, independientemente de lo que han votado con anterioridad, entiendan que la prioridad es dignificar las condiciones laborales, sociales y salariales.
Duros ataques de Sánchez y Feijóo
El líder del Partido Popular ha llamado al cambio en las elecciones autonómicas y municipales de mayo y también en las generales, advirtiendo que «cualquier voto a los candidatos del sanchismo» supone «apuntalar» en La Moncloa al actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
El presidente de los populares ha lanzado esta advertencia en Zaragoza, donde el PP ha presentado este sábado a sus candidatos autonómicos a los comicios en un acto en el que también han participado los mandatarios de Andalucía, Castilla y León y Galicia, que no se examinarán en las urnas.
«Dejaré de ser candidato muy pronto para convertirme en presidente de los españoles«, ha dicho Feijóo ante los suyos y, en una intervención trufada de críticas al Gobierno, ha pedido el voto a todos aquellos votantes, también los del PSOE, que en el caso de que ahora se volviese a votar la Constitución votarían sí.
Feijóo ha llamado a los suyos a vencer, no a empatar, al tiempo que ha recalcado que el PP no quiere liderar «ningún bloque de partidos» sino gobernar a la mayoría. «Salimos a ganar, no a especular con el resultado», ha subrayado.
Mientras, el líder del PSOE ha defendido el voto socialista en las elecciones de mayo por ser la alternativa «empeñada» en dignificar las condiciones laborales, los salarios y las pensiones, frente a los «poderosos» que solo defienden sus intereses y ofrecen «el sálvese quien pueda» a la mayoría social.
Así lo aseguró este sábado en Sevilla, donde ha participado en un acto en apoyo del alcalde de la capital hispalense, Antonio Muñoz, en el que también han estado presentes las ministras de Hacienda, María Jesús Montero, y la de la Educación, Pilar Alegría.
La polémica por las medidas antiabortistas que Vox quiere implantar en Castilla y León ha protagonizado parte del discurso del presidente, que han lanzado mensajes muy duros contra el PP. Ha asegurado que con gobiernos socialistas «habrá avances» en beneficio de las mujeres y «ni un solo retroceso», ya que no permitirán que haya ninguna regresión en el derecho de las mujeres a decidir libremente cuándo son madres y cuándo no.
El presidente ha intentado dejar claro que el PP está condicionado por Vox, como está sucediendo en Castilla y León, donde se ha logrado «la coalición del miedo», en la que a su juicio, se ha dejado claro que la derecha quiere tomar el camino que marca la ultraderecha.
En clave electoral, Sánchez ha desgranado los avances conseguidos en los tres años de legislatura de los «gobiernos de la gente» que, ha dicho, han logrado que España «hoy pinte mucho y para bien en Europa en favor de la clase media y de los trabajadores y trabajadoras de nuestro país».
Entre ellos, ha citado el cierre de 2022 con un crecimiento de la economía de más de un 5%, la consecución de las tasas de inflación más bajas de la eurozona, así como una alta tasa de empleo desconocida «desde hace más de 15 años, antes de la crisis financiera», o el ahorro en más de 4.000 millones de euros que ha supuesto para el contribuyente la solución ibérica ante la crisis energética provocada por la guerra de Ucrania.
La carta de la economía
Y todo ello, ha dicho Sánchez, «con una pandemia, una guerra, una Filomena y un volcán«, por lo que ha animado a sus posibles votantes a imaginar todo lo que va a poderse lograr «cuando el viento sople a favor».
Por ello, ante las próximas elecciones locales, generales y regionales de 2023, el responsable del PSOE ha pedido a los ciudadanos que, al margen de lo que hayan votado con anterioridad, piensen en qué país y ciudad quieren antes de emitir su voto.
Considera que deben decidir si quieren gobiernos que suban el salario mínimo interprofesional o que lo congelen como sucedió en el pasado; que revaloricen las pensiones según el IPC o las suban un 0,25 %; que primen la convivencia en vez de la confrontación territorial, o que apuesten por la sanidad pública y la dignidad de sus profesionales o por los recortes.
A juicio del presidente del Gobierno esas son las preguntas que los votantes deben hacerse ante los próximos comicios porque «lo demás es ruido y ganas de marear la perdiz».
