Sánchez ordena poner el foco en la sanidad tras detectar el desgaste del PP en sus sondeos
La estrategia pretende pasar página del ‘sí es sí’ para taponar su boquete en intención de voto y volcarse en la que será su munición electoral contra el PP
El presidente del Gobierno de España y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. | Europa Press
De nuevo, el PSOE se mueve a golpe de encuestas. Si la reforma de la ley del solo sí es sí se adoptó de forma unilateral por unos estudios cualitativos demoledores para el PSOE, los sondeos internos han ofrecido a los estrategas socialistas el nuevo filón con el que desviar la atención de la colisión con sus socios: la sanidad. Una de las crecientes y principales preocupaciones ciudadanas, que será sin duda el leitmotiv de la campaña socialista para las municipales de mayo, tanto para erosionar el bastión de la todopoderosa lideresa madrileña, Isabel Díaz Ayuso, como para crear el revulsivo electoral que necesita el PSOE para movilizar al electorado progresista y pasar página del desgaste ocasionado por la polémica del solo sí es sí.
Según fuentes socialistas consultadas por THE OBJECTIVE, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, perfiló la estrategia en la reunión de la Ejecutiva el pasado lunes en Ferraz: la creciente preocupación ciudadana por la sanidad obliga al PSOE a volcarse en la sanidad como eje principal de la campaña al 28-M. Según fuentes gubernamentales, las palabras del presidente se basan en la existencia de encuestas propias socialistas que han detectado un «desgaste importante» del PP, no solo en Madrid, sino a escala nacional. Una caída en intención de voto «nada desdeñable» que podría servir al PSOE para rentabilizar la erosión de su contrincante, al tiempo que cumple también la función de cortina de humo respecto a las revisiones a la baja de condenas a agresores sexuales y al enfrentamiento con sus socios morados de coalición.
Sánchez airea datos no publicados del CIS
El desgaste popular con el que se frotan las manos los socialistas no solo se registra en los sondeos de Moncloa. Según expresó el propio Sánchez el pasado lunes en la reunión de la Ejecutiva en Ferraz, el Centro de investigaciones Sociológicas (CIS) viene monitorizando un ascenso sostenido en el tiempo de las preocupaciones ciudadanas relacionadas con el colapso de la sanidad, especialmente en Madrid, pero también en otras partes del territorio nacional.
Unos datos que no publica el CIS semanalmente, pero que conoce la dirección federal del PSOE, que analiza estas métricas bajo la perspectiva de que la inquietud de la ciudadanía por la sanidad no es coyuntural sino estructural, como evidenció la asistencia masiva a la manifestación del domingo 12 en Madrid, que superó la asistencia de la anterior convocatoria: «Éramos 50.000 más que en la anterior manifestación, 250.000 según la delegación, aunque creo que éramos muchos más».
Ofensiva sanitaria
Sin embargo, el presidente del Gobierno ya disponía del resultado de estos sondeos internos la víspera de la Ejecutiva, el mismo domingo de la manifestación por la sanidad en Madrid. Esta se desarrollaba a la misma hora en que Pedro Sánchez se subía al atril del mitin de Málaga para arropar a su candidato, Daniel Pérez. Horas después de participar en la gala de los Goya en Sevilla, Pedro Sánchez se subió a la ola de reivindicación de la sanidad pública, aprovechando las consignas de los artistas como ariete contra el principal partido de la oposición: «Ante el modelo del PP que es que se cure quien pueda, los socialistas reivindicamos una sanidad publica, gratuita y universal», vociferó, dibujando la idea fuerza de los socialistas para el 28-M, también en Andalucía, especialmente en el sector de la atención primaria.
No en vano, fue la número dos de la Ejecutiva federal, la vicesecretaria general del PSOE y exconsejera de Salud de la Junta, María Jesús Montero, quien compareció de forma extraordinaria el lunes en Ferraz para redoblar la fuerza del mensaje socialista en el debate sanitario: «El PSOE quiere trasladar a la ciudadanía nuestro compromiso con un sistema sanitario que tiene que ser siempre un elemento de distribución de la riqueza». Y cargó contra la política de «debilitamiento y deterioro» de Ayuso. Tras presumir del incremento de gasto en sanidad del 145% entre el último presupuesto de Mariano Rajoy y el de Pedro Sánchez, Montero aseguró: «El PSOE es la principal garantía para que no haya un sistema para pobres y otro de seguros privados para privilegiados».
Moncloa y Ferraz, mano a mano
Tampoco fue casualidad que, justo al día siguiente, la candidata del PSOE por Las Palmas y ministra de Sanidad, Carolina Darias, compareciera por segunda vez en quince días, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, tras aprobar el Plan de Acción de Atención Primaria y Comunitaria, con un presupuesto «sin precedentes» de 1.000 millones de euros. Comparecencia que no desaprovechó la candidata para aportar unas ‘improvisadas’ gráficas sobre el balance sanitario del Gobierno: un incremento del 40% de plazas ofertadas de formación sanitaria especializada y del 36% en la especialidad de medicina familiar. «Estos son hechos, son datos, son realidades», afirmó Darias.
Casi a la misma hora, el portavoz del PSOE, Patxi López, ofrecía otros datos desde el Congreso de los Diputados: el incremento de un 20% de plazas MIR durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y un 40% las plazas en las facultades de Medicina. «Llegó el PP, con Ana Pastor, que ayer estaba diciendo lo que estaba diciendo, y esas plazas descendieron, se recortaron, y no se recuperaron esas plazas hasta 2018. Y ahora, con el presidente Pedro Sánchez, han aumentado más de un 20%, de 6700 a 8550. Vamos, que el PP, Rajoy, Ana pastor y compañía han sido un auténtico desastre para este país».
Una autentica ofensiva socialista que continuó el miércoles en la sesión de control con la evidente utilización de la sanidad como cortina de humo por parte del presidente del Gobierno. A la pregunta concreta de la portavoz del PP, Cuca Gamarra, Sánchez evitó contestar más que con la afirmación de que «nosotros resolvemos el problema» y arremetió contra el PP por «recortar y derivar a la sanidad privada a los pacientes de los territorios donde gobiernan e insultar a la cara a los profesionales sanitarios que se manifestaron por las calles de Madrid». Y esto no ha hecho más que empezar. Según fuentes de Moncloa y Ferraz, «toca pasar página» y la sanidad es y será el clavo ardiendo al que se aferrará el PSOE en los próximos meses para remontar el desgaste de los sondeos.
