El cerebro del 1-O, procesado por malversar, participó en la reforma del Código Penal
Josep María Jové lideró la negociación secreta entre miembros de ERC y el Gobierno para reformar el delito de malversación
Jové, a la derecha, también participó en la reunión «tres a tres» para el pacto de investidura. | Flickr PSOE
La negociación secreta que llevaron a cabo sigilosamente el Gobierno y sus socios de ERC, y desvelada por THE OBJECTIVE este sábado, estuvo liderada por uno de los hombres clave del independentismo: el llamado ‘arquitecto del procés‘, Josep María Jové, autor de la famosa Moleskine que incautó la Guardia Civil evidenciando la presunta hoja de ruta del referéndum ilegal. El cerebro del 1-O, ex secretario general del departamento de Vicepresidencia del gobierno catalán y número dos de Oriol Junqueras, fue uno de los «interlocutores clave» en la negociación con el Gobierno para reformar los tipos penales de la malversación, pese a estar él precisamente imputado por este delito en su participación crucial el 1 de octubre de 2017.
Fuentes de la negociación revelan a THE OBJECTIVE que Jové fue el principal interlocutor con el Ejecutivo y es «una figura clave» en la política de desinflamación de Cataluña de Pedro Sánchez. «No solo ha estado en esta negociación sino en toda», dicen recordando su participación en la reunión «tres a tres» para el pacto de investidura, en la que también participaron Salvador Illa, Adriana Lastra o José Luis Ábalos. Las mismas fuentes destacan también su presencia, posteriormente, en la celebración de la primera mesa de diálogo a principio de la legislatura.
La participación de Bolaños
Según fuentes de ERC, la participación de Jové es garantía de éxito de la negociación por su «compromiso inquebrantable» con la independencia. «Él participa por las condiciones de su cargo, se cree todo esto», explican las fuentes consultadas. Niegan que, con su participación en las negociaciones, Jové pudiera pretender un beneficio personal por su contribución al pacto con el Ejecutivo sobre la malversación. «No está aquí por los suyo», añaden desde las filas republicanas.
Desde el socio preferente del Gobierno aseguran con firmeza que su interlocutor homólogo por parte del Gobierno, en el inicio de la negociación concreta de la malversación, fue el ministro de Presidencia, Félix Bolaños. «Bolaños está en todas las negaciones que tenemos con el Gobierno y, obviamente, también ha estado en ésta», explican los republicanos. Aunque desde el entorno del ministro de Presidencia lo niegan y atribuyen al «ámbito partidista del PSC» los contactos que habría dirigido uno de los hombres de mayor confianza de Pedro Sánchez, el primer secretario general del PSC, Salvador Illa.
Tras meses de negaciones por parte del Ejecutivo, el entorno de Bolaños admite ahora los contactos previos al acuerdo entre PSOE y ERC pero niega una implicación directa del ministro de Presidencia o del Palacio de La Moncloa. Algo que ya admiten hasta fuentes de la propia Moncloa, consultadas por THE OBJECTIVE. Una versión que también ratifican los republicanos, que atribuyen la participación de Illa y el PSC a una actividad «puntual» frente a «la voz cantante, que la llevaba Moncloa».
Montero también entró en las conversaciones
Tanto ERC como Moncloa confiesan que estos encuentros se produjeron en varios niveles, tanto en grupos de trabajo técnicos como políticos, y en los que «entró y salió mucha gente». Aunque señalan a Bolaños como un fijo en la comisión negociadora en la que, en ocasiones, «estuvo acompañado por otra ministra». Fuentes socialistas y gubernamentales señalan a la titular de Hacienda, María Jesús Montero, por su experiencia en la negociación presupuestaria que mantuvo con los republicanos, y su portavoz, Gabriel Rufián.
Paradójicamente, la participación de Jové en la reforma de los tipos penales sobre malversación no le ha granjeado beneficio personal alguno. La Fiscalía anunció este viernes que solicita siete años de prisión por su participación el 1-O por un delito de malversación agravada, y no por el tipo atenuado que pactó con sus interlocutores mosclovitas. En Twitter manifestó su indignación con la siguiente afirmación: «Miserables, malas personas, pero sobre todo… Mucha cobardía».
La Fiscalía también pide seis años y tres meses de prisión para el presidente del puerto de Barcelona, Lluís Salvadó. Además de prevaricación y desobediencia, por organizar el 1-O, el Ministerio Público le aplica la modalidad agravada de malversación que negoció Salvadó en nombre de ERC. Una reforma del tipo penal que tampoco ha beneficiado a Oriol Junqueras ni al resto de líderes independentistas condenados por el ‘procés’.
Gol a ERC
Según fuentes conocedoras de las negociaciones, la idea inicial de ERC era reducir las penas de inhabilitación para que Junqueras y el resto pudieran presentarse a las elecciones. Desde Moncloa, presumen de haberle metido un «gol» a ERC. Fuentes jurídicas señalan que la coautoría de la reforma de la malversación por parte de ERC, explica por qué los líderes de ese partido están centrando sus críticas en los jueces y fiscales.
Para los procesados por los gastos del procés -Jové, Salvadó y la exconsejera de Cultura Natalia Garriga- el Ministerio sigue el criterio del Tribunal Supremo. En la revisión de la sentencia del «procés», el Alto Tribunal descarta que los gastos del 1-O encajen en el delito de malversación atenuada introducido en la reforma del Código Penal, previsto para los casos en que no hay ánimo de lucro.
