Interior envía 20 antidisturbios de la Península a Canarias para aliviar la congestión migratoria
La ruta canaria ha registrado la llegada de más de 10.000 personas procedentes de África solo en el mes de octubre
Dos cayucos con 327 migrantes llegan a la isla de El Hierro. | EP
El Ministerio del Interior ha decidido enviar a un grupo de la Unidad de Intervención Policial (UIP), los antidisturbios, de La Coruña (Galicia) a Canarias para reforzar la plantilla policial en Tenerife ante el desafío que está suponiendo la oleada migratoria en el archipiélago, según ha podido saber THE OBJECTIVE. Los agentes llegan este martes a la capital tinerfeña y esta previsto que se desplacen en las próximas horas a la isla del Meridiano. Se trata de la primera vez que el departamento dirigido por Fernando Grande-Marlaska manda efectivos de la península desde que estallase la crisis migratoria, a finales del pasado mes de septiembre. Hasta ahora, se había destinado a agentes de manera temporal a la isla de El Hierro desde la Comisaría Provincial de Tenerife.
Si la situación era entonces crítica, ahora lo es aún más. Este fin de semana, en menos de 48 horas, llegaron al archipiélago más de 1.700 inmigrantes. En lo que va de octubre, en cualquier caso, ya son más de 10.000 los que han tocado tierra en la comunidad autónoma, según datos de Salvamento Marítimo. La mayoría, indican fuentes policiales, llegan desde las costas de Senegal por la situación política que está viviendo el país. Una crisis sin precedentes que está llevando al límite los recursos del Estado, y que, según los informes que maneja el Gobierno, podría alargarse hasta mediados de noviembre.
Alojados en aparcamientos
La congestión migratoria ha llevado a la Policía Nacional a improvisar soluciones y alojar a los inmigrantes en el aparcamiento de la Comisaría Sur de Tenerife, tanto a los que llegan a esta última como a los que arriban a El Hierro y después son desplazados en ferri, tal como dictó Interior, a otras islas del archipiélago. Desde hace al menos cinco días, cientos de personas duermen sobre el asfalto de las dependencias policiales porque todos los centros de atención temporal a extranjeros están llenos en las islas. Idéntico escenario se vivió también en otra comisaría de Lanzarote, donde otras 200 inmigrantes tuvieron que pernoctar.
En Tenerife, en cualquier caso, se contemplaban estas soluciones desde el comienzo de la crisis migratoria. Los agentes, indican las mismas fuentes, recibieron orden de sacar todos los coches del aparcamiento hace más de un mes. Los sindicatos policiales han expresado su preocupación a los responsables de la comisaría, por las condiciones de insalubridad que esta provocando la situación de hacinamiento de inmigrantes, alojados en el aparcamiento. Desde las organizaciones sindicales, no obstante, insisten en que los efectivos enviados por el Ministerio no son suficientes y precisan de más medios para hacer frente a otros problemas derivados como la proliferación de patologías contagiosas.
El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha denunciado este lunes un «brote de enfermedades infecto contagiosas» entre los inmigrantes que han arribado a las costas canarias. Al parecer algunas personas han tenido que ser hospitalizadas tras llegar a las islas por tuberculosis. «Los agentes no cuentan con los medios suficientes, no hay epis, y no se está siguiendo el protocolo de aislamiento adecuado», denuncian desde el SUP, que estudia distintas acciones legales por esta situación.
Colapso en la Fiscalía
En paralelo, «las constantes llegadas de cayucos y pateras» también han llevado al colapso a la Fiscalía Provincial de Tenerife, según ha desvelado THE OBJECTIVE. En una nota interna, el jefe del Ministerio Público en la capital tinerfeña señala que está siendo «imposible acometer el trabajo» para, entre otras tareas, verificar la edad real de los inmigrantes que ingresan en Canarias diciendo ser menores no acompañados.
En el documento, el fiscal jefe de Tenerife revela un «desproporcionado e insoportable aumento de trabajo para los fiscales adscritos a la Sección de Trata y Extranjería de la Audiencia Provincial». Una sección que se encuentra huérfana desde hace semanas. La última fiscal delegada de Extranjería del Ministerio Público en Tenerife, Carolina Barrio, cesó el pasado 7 de septiembre para irse a Eurojust, un organismo europeo con sede en La Haya, según consta en el BOE. Nadie quiere ocupar su plaza. Ha quedado desierta.
La Fiscalía General del Estado (FGE) había aprobado a mediados de junio la salida a Europa de la fiscal delegada de Extranjería en Tenerife. Sin embargo, cuatro meses después, su plaza solo ha podido ser cubierta de forma interina y temporal en plena oleada de inmigrantes que arriban en cayucos y pateras a las costas del sur de Tenerife, y de los que han sido trasladados desde El Hierro.
Descontrol con los menas
El fiscal jefe provincial de Tenerife, José Luis Sánchez-Jáuregui, admite que todas medidas adoptadas para intentar capear la situación actual migratoria «se han demostrado insuficientes, en especial en cuanto a los expedientes de determinación de edad de los menores no acompañados (menas) que arriban en dichas embarcaciones».
Fuentes policiales aseguran que, ante la actual situación de colapso de la Fiscalía y sus dificultades para comprobar las edades reales de los menas, muchos recién llegados a Canarias se hacen pasar por menores de edad sin serlo. La ley prohíbe retornar a los menas a sus países, por lo que automáticamente quedan registrados como solicitantes de asilo como menores de edad, a la espera de que se tramiten sus expedientes en los juzgados para verificar sus edades reales.
