La Junta de Castilla y León respalda al sector primario frente al acuerdo con Mercosur
El Ejecutivo regional defiende los intereses agrícolas y ganaderos, frente a los riesgos del tratado comercial
Comparecencia en rueda de prensa de Carlos Fernández Carriedo. | Archivo (JCyL)
El portavoz de la Junta de Castilla y León y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, expresó el pasado miércoles su inquietud por las consecuencias que podría tener el acuerdo comercial entre la Unión Europea y Mercosur en el sector primario de la región.
En declaraciones realizadas a la Agencia Ical, recogidas por THE OBJECTIVE, Fernández Carriedo advirtió que este tratado, diseñado para facilitar el intercambio de productos entre ambas partes, podría poner en jaque a los agricultores y ganaderos locales debido a la competencia desleal y las desigualdades normativas existentes.
Principales problemas identificados
Desde la Junta de Castilla y León señalan que, con la entrada en vigor del acuerdo, se prevé una masiva llegada de productos agrícolas y cárnicos procedentes de países de Mercosur como Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay. Esto generaría una feroz competencia para los productores autóctonos, que operan bajo estrictas normativas europeas en materia de calidad, seguridad alimentaria y sostenibilidad.
Además, advierten que muchos de estos productos no cumplen con los estándares exigidos en la Unión Europea, lo que podría derivar en una caída significativa de los precios en el mercado interno, colocando a los productores locales en una clara desventaja.
«No podemos permitir que nuestros agricultores y ganaderos compitan en condiciones tan desiguales», insisten desde la Consejería de Agricultura y Ganadería.
Riesgos para la sostenibilidad
Otro aspecto preocupante es el impacto ambiental vinculado a los productos procedentes de Mercosur. Según alerta la Junta, el tratado podría fomentar prácticas agrícolas insostenibles en países como Brasil, donde la deforestación del Amazonas está directamente relacionada con el aumento de la producción de carne y soja destinadas al mercado europeo.
Este escenario contrasta con los esfuerzos realizados en Europa para avanzar hacia modelos agrarios más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente. Asimismo, la Junta subraya que los controles menos rigurosos en los países exportadores pueden comprometer la seguridad alimentaria y la salud pública, afectando también la confianza de los consumidores.
Críticas al Gobierno central
Carlos Fernández Carriedo cargó el martes contra el Gobierno de España, en particular contra el ministro de Agricultura, Luis Planas, por lo que considera una «falta de información y participación» ofrecida a las comunidades autónomas y a los sectores afectados para consensuar una posición común frente al acuerdo.
El consejero reiteró su apoyo a los agricultores y ganaderos de Castilla y León, exigiendo que los productos importados desde América cumplan con los mismos estándares que se exigen a los europeos. «No hemos recibido la información necesaria ni se nos ha permitido participar como correspondía», lamentó Fernández Carriedo.
