El Gobierno y los socialistas vascos critican a Barrionuevo y repudian a los GAL
El actual titular del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha dejado claro que «lo del GAL» fueron actuaciones terroristas de «una gravedad máxima»
El exministro socialista José Barrionuevo. | Europa Press
Los Gobiernos central y vasco, los socialistas de Euskadi, los partidos nacionalistas y asociaciones de víctimas han repudiado la «guerra sucia» del Estado contra ETA y han censurado las palabras del exministro socialista del Interior José Barrionuevo sobre el GAL en una entrevista en El País. En ella Barrionuevo asumía y justificaba el terrorismo de Estado para luchar contra ETA y entre otras cuestiones admitía que ordenó «liberar a Segundo Marey», cuando supo que la policía española lo había secuestrado por error.
El actual titular del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha dejado claro que «lo del GAL» fueron actuaciones terroristas de «una gravedad máxima«. Con ETA «quedó claro que los únicos medios que hicieron posible su derrota fueron los que siempre creímos los demócratas, que es el Estado de derecho y la aplicación de la ley, que es lo que hicieron nuestros cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado», ha afirmado.
Por su parte, el portavoz del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria, ha dicho por su parte que el Ejecutivo autonómico -formado por PNV y PSE- «exige reparación, justicia, verdad y solidaridad con todas las víctimas; la violencia es inaceptable y la violencia de Estado es, además, ilegal e ilegítima». «Todos, y cuando digo todos me refiero a todos, deberíamos decir algo sobre estas declaraciones tan graves», ante las cuales las víctimas del GAL, ha apuntado, «solo pueden sentir humillación».
El secretario general de los socialistas de Euskadi, Eneko Andueza, ha calificado de «inaceptables» las palabras del exministro porque pretenden «justificar hechos muy graves, repugnantes, que van contra la democracia y contra el Estado de derecho». «Son palabras reprochables, porque duelen a las víctimas, son injustas con ellas porque no las tienen en cuenta, las desprecian» y deben ser estudiadas por la Justicia para «determinar si de ellas se deriva alguna responsabilidad», ha expuesto.
Andueza ha asegurado que el terrorismo del GAL «va a contar siempre con la condena y el rechazo contundente» del PSE y por ello «carecen de sentido las apelaciones (a su partido) de aquellos que todavía hoy no condenan el terrorismo en todas sus expresiones» como la izquierda abertzale.
PNV y Bildu piden explicaciones
El PNV ha anunciado su intención de preguntar en las Cortes Generales al ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, si el Gobierno «considera legítimas y democráticas las actuaciones relatadas» por Barrionuevo y si cree si «son merecedoras de investigación por parte de la comisión que contempla la Ley de Memoria Democrática».
Mientras, EH Bildu ha pedido las comparecencias en el Congreso del propio exministro para que explique sus palabras y la de Bolaños para aclarar la posición del Gobierno ante estas declaraciones y las consecuencias que pueden derivarse en cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática. El coordinador general de la coalición abertzale, Arnaldo Otegi, ha denunciado que Barrionuevo «con total impunidad, reivindica el terrorismo de Estado» y ha apuntado que «el silencio de la mayoría de jueces, medios de comunicación y partidos es cómplice».
También el portavoz de Catalunya en Comú, Joan Mena, ha considerado «una vergüenza» que el exministro «trate de justificar el terrorismo» y «la guerra sucia del Estado», y que esto lo haga «con total impunidad». «No es lógico que (sus declaraciones) no tengan ninguna consecuencia», ha añadido.
Asociaciones de víctimas de ETA se han sumado a las críticas a Barrionuevo. El colectivo de víctimas del terrorismo de Euskadi, Covite, ha tachado sus afirmaciones de «inaceptables e indignas». Los GAL «nunca debieron existir, fueron un error y un horror», ha considerado. La Fundación Fernando Buesa, creada en homenaje a el político socialista asesinado por ETA en 2000, encuentra «profundamente ofensivo y doloroso» el contenido de la entrevista a Barrionuevo. Es «absolutamente inaceptable e indigno defender la ‘guerra sucia’ en un país democrático», ha afirmado.
