La crisis política brasileña y la subida de precios zarandean a Petrobras, que pierde casi un 10%
La caída se produce después de haber anunciado nuevos ajustes en los precios de la gasolina, un 5,2% más cara, y del diésel, que se ha ajustado en un 14,3%
Las acciones de Petrobras sufrían en la sesión de este viernes una caída del 9,51%, después de haber anunciado nuevos ajustes en los precios de la gasolina, un 5,2% más cara, y del diésel, que se ha ajustado en un 14,3% al alza a partir del sábado.
En concreto, los títulos de la principal petrolera de Brasil cotizaban por debajo de los 30 reales brasileños, frente a los 32,27 que marcaban al cierre de la jornada del jueves.
La caída en el mercado bursátil se asocia al riesgo de una nueva injerencia política en la compañía, después de que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunciara hace pocas semanas su intención de nombrar a Caio Paes de Andrade como el cuarto presidente de Petrobras durante su legislatura. Su sucesor, José Mauro Ferreira Coelho, apenas llevaba 40 días en el cargo.
No obstante, el consejo de administración de la compañía aclaró que el proceso de nombramiento de Paes de Andrade tendrá que ser sometido a la deliberación del gobierno interno para el análisis de los requisitos legales y de gestión del movimiento auspiciado por Bolsonaro.
A los movimientos orquestados por el presidente de Brasil, se suman las declaraciones del presidente de la Cámara de Diputados, Arthur Lira, quien poco después de que la empresa anunciara el nuevo ajuste en los precios pidió en su cuenta de Twitter la renuncia inmediata del presidente de Petrobras en la actualidad, José Mauro Ferreira Coelho.
«El presidente de Petrobras tiene que renunciar de inmediato», ha dicho Lira en la red social.
Política de precios
La estatal brasileña Petrobras anunció un nuevo aumento de los precios de los combustibles este viernes, lo cual ha generado una dura reacción del presidente Jair Bolsonaro, quien alertó de que la empresa puede llevar al país al «caos».
La empresa, controlada por el Estado pero con capital mixto y cuyas acciones cotizan en las bolsas de Sao Paulo, Madrid y Nueva York, justificó esa decisión en las turbulencias de los mercados internacionales de crudo y aclaró que no alteraba los precios desde hace casi 100 días, por lo cual el aumento ya era inaplazable.
Bolsonaro, quien en los últimos meses ha mantenido una durísima campaña contra las políticas de precios de Petrobras, que se guían por las oscilaciones del mercado internacional, se pronunció en contra de ese nuevo aumento poco antes de que fuera oficializado.
«Petrobras puede sumergir a Brasil en el caos. Su presidente, sus directores y sus consejeros bien saben lo que ocurrió en 2018 con la huelga de camioneros y sus consecuencias nefastas para la economía y la vida del pueblo», manifestó en sus redes sociales.
El mandatario aludió así a una paralización de camioneros que, en 2018, él mismo como candidato presidencial apoyó, que duró once días y generó una seria crisis de abastecimiento en muchas regiones del país.
Descontento con las políticas de precios de Petrobras, Bolsonaro ha destituido a tres presidentes de la empresa desde 2019 y está a la espera de la aprobación, por parte de la compañía, de un nuevo directivo.
Además, ha promovido una reducción de los impuestos regionales que se aplican a los combustibles, que deberá entrar en vigor la semana próxima, pero cuyo impacto en el precio final será limitado y reducido aún más con el nuevo aumento anunciado por Petrobras.
Lula critica a Bolsonaro por no bajar él los combustibles
El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva aseguró este miércoles que la bajada del precio del combustible es cuestión de «una firma» y ha criticado la falta de «coraje» del presidente, Jair Bolsonaro, para llevar a cabo medidas que de verdad tengan efectos prácticos para la población.
«El aumento de la gasolina al precio internacional no fue a través de una votación en el Congreso, fue con una firma de Pedro Parente, presidente de Petrobras. Si para aumentar el precio del combustible para equipararlo al internacional fue una cosa de una firma, para retirarlo también», ha argumentado.
«El presidente si tuviese coraje, si no fuese un fanfarrón, un embustero, ya lo habría hecho», ha reprochado a Bolsonaro el todavía precandidato del Partido de los Trabajadores (PT) a las próximas elecciones de octubre durante una entrevista para la emisora de radio Itatiaia, en Minas Gerais.
En ese sentido, ha cuestionado que la reducción del ICMS -el impuesto a la circulación de mercancías y servicios- no se traducirá en un descenso del precio de los combustibles, sino en una merma a las arcas de los estados y los municipios que acabará por afectar a la inversión en políticas públicas.