La estrategia secreta de Díaz: inflar Más País para diluir a Podemos en las listas municipales
La ministra impulsa secciones de Más País para dar una sensación de presencia territorial. Quiere que estén sobrerepresentados en la mesa de negociación
Podemos quiere que las elecciones andaluzas sean un punto de inflexión. En el cuartel general de la formación morada sostienen que a nivel mediático ha trascendido como un fracaso de Yolanda Díaz, y que a partir de ahora se puede volver a «debatir» con ella desde una posición de mayor fuerza. Para que esto ocurra, no obstante, hace falta frenar cuanto antes el plan que la ministra de Trabajo está estudiando para diluir el peso de los morados de cara a las elecciones municipales y autonómicas de 2023.
Fuentes de varios sectores de Podemos sostienen que Díaz y miembros de su equipo están impulsando secciones de Más País a nivel local para dar una sensación de presencia territorial a través de la cual debilitar a Podemos en las mesas de negociación. Los morados asumen que hay que llegar a acuerdos con las demás familias de la izquierda alternativa al PSOE. «Es algo incuestionable», explican. Pero la clave será con cuántos nombres en las listas electorales y en qué posición.
El antecedente andaluz preocupa. En esa región Yolanda Díaz se involucró personalmente. Eligió a la candidata, Inma Nieto, descartando al dirigente propuesto por Podemos. El resultado fue malo: cinco diputados, con ningún representante del PCE en las instituciones, y números por debajo de la época de Gaspar Llamazares y Cayo Lara, como desveló este diario. Y de estos cinco diputados, Más País logró uno: «Es algo muy importante porque Más País en Andalucía no tiene nada de nada», reprochan en Podemos.
El mismo plan de Podemos en 2015
El caso andaluza ha servido de aviso. Podemos observa como en otros territorios personas de confianza de Díaz están tanteando a ex cargos de Podemos y afines a Errejón para crear algo parecido a sucursales de Más País que sirvan de cortafuego contra Podemos. «Si Más País llega a la mesa sobrerepresentado, Podemos se va a diluir, porque ellos ocuparan puestos en las listas que no les correspondería», explica un miembro del partido de Irene Montero. De esta forma, acusan los morados, Más País tendrá un peso mayor que su real fortaleza política. Y Podemos, un peso menor.
Este es el plan secreto que maneja Díaz y que en Podemos conocen muy bien. Entre otras cosas porque se parece mucho a lo que hicieron los morados en 2015. «Yolanda no inventa nada, esto fue lo que hicieron Pablo Iglesias y Juan Carlos Monedero en 2015. Entonces dijeron que no iban a poner la marca del partido en ninguna lista municipal. No querían que otros cargos, sobre todo los de IU, se aprovecharan del tirón de Podemos. Yolanda está haciendo lo mismo con Sumar», resumen.
Lo cierto es que Yolanda Díaz ha dejado entender que no quiere exponerse personalmente, y que de ninguna manera presentará su marca Sumar en las próximas municipales y autonómicas. Quiere mantener la sigla impoluta para las elecciones que más le importan: las generales. Esta decisión ha generado malestar en la cúpula morada, donde entienden que todo está finalizado a reducir su peso específico en la nueva plataforma.
«Ya está todo inventado»
Podemos no tiene ninguna intención de repetir la negociación que se celebró en Andalucía. Pablo Iglesias lo dejó claro el lunes, y en la formación morada aseguran que para Díaz el fracaso de Inma Nieto ha sido un golpe duro a nivel de imagen pública. Cierto desánimo se percibe, en efecto, en el entorno de Díaz. En la rueda de prensa del pasado martes tras el consejo de Ministros, la vicepresidenta esquivó todas las preguntas sobre las elecciones andaluzas y la dimisión de Oltra.
Díaz interpretó un guión nuevo. Pasó de la sonrisa a las frases de circunstancia. Pero dejó de lado el mensaje conciliador. Podemos, mientras tanto, aprovecha la coyuntura para exigir más firmeza. Así lo expresó el propio Iglesias el pasado lunes con un claro guiño (según las fuentes internas de Podemos) a la ministra de Trabajo. No es descartable, por lo tanto, que Díaz retoque en parte su argumentario.
La dirigente está ahora exigiendo a la parte socialista del Gobierno un impuesto extraordinario a las eléctricas para cubrir la rebaja del IVA y la subvención a la gasolina. Pero la ministra de Hacienda gana tiempo. Algunos sostienen que es una «lucha de agendas» para ponerse la medalla de la medida, pero en el sector también advierten de que habrá repercusiones legales y ya afilan los cuchillos.
En esta tormenta perfecta Podemos mira a las autonómicas y municipales de mayo. Madrid amenaza con convertirse otra vez en zona cero de la batalla interna. La relación entre pablistas y errejonistas sigue siendo muy compleja, y la derrota andaluza ha complicado el acercamiento de Díaz a todos los que desean vengarse de Iglesias. Máxime porque en el partido están observando los movimientos de la gallega, y tienen la intención de frenar el intento de inflar en las regiones a Más País para influir en las próximas negociaciones. «Ya está todo inventado», advierten desde el partido de Iglesias.