Sánchez arranca la maquinaria electoral: pánico en el PP por el efecto de los cheques en el voto
Feijóo reclama que los 200 euros se amplíen a 8 millones de personas ya que temen que PSOE y Podemos vinculen su mantenimiento a seguir en el poder
El sexto paquete anticrisis por la guerra en Ucrania aprobado este martes por el Gobierno de Pedro Sánchez será recordado por dar el pistoletazo de salida a la maquinaria para el ciclo electoral de 2023. Un total de once decisiones a las que se destinarán 10.000 millones de euros y que afectan al IVA, al alquiler, a la cesta de la compra y al transporte público urbano, entre otros. Todo ello el mismo día que se dio luz verde además a la revalorización del 8,5% de las pensiones el próximo año.
Curiosamente, el PP de Alberto Núñez Feijóo se mostró insatisfecho con el anuncio de medidas económicas que lanzó Sánchez tras el Consejo de Ministros, al entender que se quedaba corto y al copiar tarde algunas de las medidas que desde Génova se pusieron sobre la mesa en septiembre para aliviar el coste de la cesta de la compra.
Aunque en público algunos dirigentes como el senador Antonio Hernando criticaron las «paguitas que llegan a unos pocos» como el cheque de 200 euros para familias con rentas inferiores a 27.000 euros y un patrimonio inferior a 75.000 euros, en Génova apuestan por extender este pago único anual del que se beneficiarán 4,2 millones de personas a la clase media «que también está sufriendo la inflación». La secretaria general de los populares, Cuca Gamarra, cifró en 8 millones los potenciales beneficiarios si se ampliase esta ayuda.
Fuentes del PP subrayan a THE OBJECTIVE que con ello se quiere romper el voto cautivo con el que el PSOE y Podemos se presentarán al ciclo electoral de 2023 al beneficiar a esas 4,2 millones de familias con salarios bajos, a los que los socialistas y morados advertirán en la campaña electoral, según sospecha Génova, que el mantenimiento de dicha ayuda dependerá de que ellos sigan gobernando la próxima legislatura.
Además, las citadas fuentes hacen hincapié en que nada impide al Gobierno de coalición elevar ese cheque en sucesivos años si la izquierda se mantiene en el poder y recuerdan que el monto acordado dentro del Ejecutivo es menor al exigido en la negociación por la líder de Podemos, Ione Belarra, quien esperaba que fuera de entre 200 y 500 euros.
Las medidas de Sánchez «se quedan cortas»
Gamarra criticó que el anuncio de medidas económicas de Sánchez «llega tarde y se queda corto ante la situación que viven los españoles«. El último paquete anticrisis lanzado por el Gobierno suprimirá durante seis meses el IVA del 4% que se aplica a todos los alimentos de primera necesidad, entre ellos el pan o la leche, y rebajará del 10% al 5% el del aceite y la pasta para hacer frente al impacto de la guerra en Ucrania.
La número dos del PP incidió desde Génova en que si por algo se caracteriza el 2022 es por haber sido «el año de la inflación» que, a su juicio, han pagado los españoles a un precio «muy caro» por culpa de Sánchez. No obstante, esta situación no la han vivido las arcas públicas, que han alcanzado un «récord de recaudación» por parte del Gobierno, con más de 33.000 millones de euros de excedente por la subida de los precios en comparación con lo presupuestado.
Gamarra, asimismo portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, insistió en que el incremento de recaudación que ha logrado Sánchez, principalmente por vía del IVA, no ha servido para aliviar la economía familiar ya que, en su opinión, llega en el «último minuto«.
Si el Ejecutivo de Sánchez hubiera hecho caso a Feijóo en septiembre cuando este último pidió rebajas del IVA a productos de primera necesidad, habría supuesto un ahorro de 300 millones en la cesta de la compra de los españoles en estas fiestas navideñas. Incluso, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, reclamó en marzo bajar este impuesto a productos básicos, el combustible o la luz. Pero ahora se acercan elecciones. El momento elegido por Sánchez para llegar al mayor número de personas con sus medidas anticrisis.
«Esos 300 millones de euros en la cesta de la compra ya se han pagado y ya están en las arcas del Gobierno de España», recriminó Gamarra al Ejecutivo antes de recordar que la bajada del IVA deja fuera a productos como la carne, el pescado, las conservas o el agua, pese a que «se han encarecido de manera sustancial en los últimos años». Un argumento esgrimido también por los ‘súper’ al criticar la limitación de la medida.
La secretaria general del PP dejó abierta, no obstante, la posibilidad de que sus diputados del grupo parlamentario apoyen finalmente el real decreto a finales de enero, cuando se someta a votación en la Cámara baja. En todo caso, si finalmente fuese un ‘no’, Gamarra deslizó que el sentido del voto definitivo no se debería entender entonces «como la oposición a todas y cada una de las medidas, sino al final al conjunto del real decreto».