La moción de censura de Vox se debatirá y votará en el Congreso los días 21 y 22 de marzo
El economista Ramón Tamames será el candidato que buscará sustiruir a Pedro Sánchez. Por el momento, los de Abascal no suman los votos de otros partidos
La moción de censura de Vox con Ramón Tamames como candidato a la Presidencia del Gobierno ya cuenta con fecha de celebración. El Congreso de los Diputados escuchará y votará las propuestas del economista entre los días 21 y 22 de marzo, tras lo que se conocerá si los de Santiago Abascal vencen con su plan y sustituyen al secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, al frente de la Administración.
Lo ha anunciado la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, en una breve rueda de prensa en la Cámara, donde ha aclarado los días y el procedimiento que se seguirá en la que ya es la segunda moción de censura de la legislatura, todas emprendidas por Vox, aunque con diferentes cabezas visibles.
La moción de los diputados de Santiago Abascal fue registrada el 27 de febrero y fue aceptada por la Mesa del Congreso el pasado día 7 de marzo al cumplirse con los requisitos indispensables: haberse presentado al menos por una décima parte de los diputados, un escrito motivado y la aceptación de un candidato para liderar la propuesta y, en caso de salir victorioso, convertirse en el nuevo presidente del Gobierno.
La moción de Vox, un futuro incierto
Por el momento, las opciones de Tamames son más bien pocas. Salvo un giro radical de los acontecimientos, el economista de 89 años está condenado a la derrota tras el anuncio de Ciudadanos y PP, que han adelantado su voto en contra sin necesidad de escuchar antes su discurso y sus propuestas. Los naranjas tentaron la abstención en un principio, siendo una de las formaciones que con más fuerza pedía una moción contra el presidente por la reforma del Código Penal en favor del independentismo.
Sin embargo, con la llegada de la nueva dirección, en manos de Patricia Guasp y Adrián Vázquez, la postura viró hasta situarse en el ‘no’, acabando con el único apoyo de Vox.
Por su parte, el PP se encuentra muy alejado de los planes de los de Abascal y el propio Feijóo ya anunció que en ningún caso votarían en contra de la moción, aunque tampoco lo harían a favor al considerar que ni el candidato era el idóneo ni el momento el adecuado.
Desde el PSOE ya han anunciado su negativa y sostienen que el PP debería seguir sus pasos, de lo contrario estarían —a su parecer— acatando las posiciones de Vox y acercándose a la «ultraderecha». Durante estas semanas, varios ministros del Ejecutivo han defendido la denostada figura de Pablo Casado (atacada hace unos pocos meses por ellos mismos), quien en la primera moción votó en contra al considerar que no buscaba acabar con el Gobierno, sino contra su partido en un momento en el que las encuestas les situaban muy cerca.
El candidato Tamames también ha sido una complicación para los de Abascal, quien ante cada entrevista del economista —en las que se olvidaba de por qué partido concurre y enmendar la plana de varias de sus pilares ideológicos— sostenía ante los medios que se encontraban tranquilos y que él no era miembro de la formación.