El PSOE de Madrid ve en el bono térmico el filón para superar a Mónica García
El entorno de Lobato critica la «hiperventilación» de la portavoz de Más Madrid y confía en recuperar la hegemonía en la izquierda en Madrid.
La polémica del bono térmico se ha convertido en el cisne negro de la precampaña electoral con un surtido de afectados y sólo un beneficiado: el secretario general de los socialistas madrileños, Juan Lobato. El líder del PSOE en la región ha visto en esta polémica el filón electoral que necesitaba para consumar el sorpasso a su contrincante de Más Madrid, Mónica García, y recuperar así la hegemonía en la izquierda que perdió el PSOE en las elecciones de mayo del 2021. Fuentes de su entorno consultadas por THE OBJECTIVE ven a García «hiperventilar» con este asunto en el que ha demostrado su «falta de coherencia» al demostrarse que también ella ha sido receptora de estas ayudas de calefacción y agua caliente a familias vulnerables, después de haber exigido la dimisión del vicepresidente de la Comunidad, Enrique Ossorio, por este motivo.
Tanto es así que Mónica García lidera el mensaje de WhatsApp que circula por el PSOE sobre los beneficiarios de estas ayudas a familias numerosas y vulnerables, seguida del vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, el jefe de campaña de Isabel Díaz Ayuso, Alfonso Serrano, y la incógnita en torno a la portavoz de Vox, Rocío Monasterio. Un listado que concluye con un Lobato y un X roja que le excluye de su condición de beneficiario.
En conversación con este periódico, fuentes del entorno del propio Lobato muestran a THE OBJECTIVE la factura del propio secretario general del PSOE de Madrid del anterior periodo de facturación, por un importe de 68,44 euros y con una referencia expresa a la financiación del bono social, que pagan los clientes excluidos del bono o que no lo han solicitado, por importe de 1,14 euros. «Desde hace año y medio, Lobato tenía derecho a pedirlo», cuando nació su tercera hija, «pero no lo pidió».
Tensión en la Asamblea de Madrid
En su intervención en el pleno de la Asamblea de Madrid, el propio Lobato ha exhibido su factura sin leer los aspectos concretos de la facturación: «¿Sabe lo que es esto? Es la factura de la luz de mi casa. ¿Sabe lo que pone aquí que pagamos mi mujer y yo? Financiamos con un importe concreto el bono social. El bono social no lo paga ningún gobierno, lo pagamos los españoles con nuestra factura y de él se benefician muchas familias que efectivamente lo necesitan. Pero también se benefician algunas personas que se dedican por el día a criticar estas ayuditas y por la noche se dedican como vampiros a pedirlas todas y no dejarse ni una. Estas ayudas no engañan a nadie. Esto no es automático, hay que pedirlo. ¿Y sabe cuál es la prueba? Que quien lo pide, lo cobra. Y quienes no lo pedimos, no lo cobramos. Esa es la diferencia».
Una referencia velada a la líder y portavoz de Más Madrid, Mónica García, quien aseguró que la ayuda era «automática» y que se le concedía, sin necesidad de solicitarlo, a todas las familias numerosas. La candidata de Más Madrid pidió perdón y prometió devolver unas ayudas que «no necesito, no quiero cobrar eso». Este jueves, tras reconocer que la ayuda la solicitó su marido, la portavoz de Más Madrid admitió en la Asamblea el error: «Siento vergüenza cuando me equivoco, empatía cuando alguien lo pasa mal y rabia cuando atacan a mi familia».
Un ‘patinazo’ que, según fuentes del PSOE de Madrid, evidencian el nerviosismo y la sobreactuación de García: «El problema de Mónica es la falta de coherencia» entre lo que dice y lo que hace. Pero, sobre todo, que cuando se está «todo el día hiperventilando, se cometen errores. Mira lo del accidente del 11-M… No se puede ir así». Los socialistas madrileños denuncian la falta de rigor y la precipitación de la líder de Más Madrid en casos recientes como éste, sus palabras sobre el «accidente del 11-M» o el atropello de una niña que falleció y del que Mónica García culpó al alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida.
«Sería una buena consejera de Sanidad»
La crítica recurrente sobre García es que «ni siquiera sería una buena vicepresidenta de la Comunidad», ante la posibilidad de un eventual pacto en la izquierda presidido por el PSOE, sino que relegan su capacitación a la de una «buena consejera de Sanidad de la Comunidad». Porque, a juicio del PSOE, «le falta un conocimiento trasversal sobre fiscalidad, empleo, tributación… pero sobre todo, le faltan tablas», reprochan desde el equipo de Lobato, atisbando el filón electoral de un posible adelantamiento a Más Madrid que, en estos momentos, no registran sus sondeos. La confianza en Buen Suceso es que la campaña de Mónica García siga pinchando y la de Lobato siga evidenciando su coherencia.
Es más, las fuentes consultadas recuerdan la regulación que aprobó el propio Lobato en su etapa como alcalde de Soto Del Real, donde aprobó una normativa para las familias numerosas con límite de renta y con carácter progresivo, de manera que «el que pasaba el límite no lo puede pedir y el resto les toca más subvención a las rentas más bajas y menos a las más altas».