Alberto Rodríguez buscará un asiento en el Parlamento canario y la Alcaldía de La Laguna
El exdiputado de Unidas Podemos regresa a la política a nivel local de la mano de su nuevo partido, Drago, fundado tras su expulsión del Congreso
El portavoz de Drago Verdes Canarias, Alberto Rodríguez, ha anunciado este miércoles que va a presentar su candidatura a la Alcaldía de La Laguna en las elecciones del próximo 28 de mayo, además de concurrir al Parlamento autonómico de las Islas Canarias.
Ha explicado que aspira a la Alcaldía de La Laguna para evitar que «la desafección y la decepción» que a su juicio han causado los últimos cuatro años de gobierno municipal (un pacto de PSOE, Unidas se Puede y Avante Laguna) se traduzcan en una abstención que suponga el regreso de las fuerzas conservadoras.
Alberto Rodríguez, exdiputado de Podemos, partido que abandonó después de perder su escaño en el Congreso tras una condena judicial, concurrirá también a las elecciones autonómicas encabezando la lista regional de Drago Verdes Canarias.
Su objetivo, subrayó, es que «la gente encuentre una papeleta de esperanza y de ilusión», una alternativa para los que nunca van a votar ni a «los que llevaban toda la vida», en alusión a CC, ni tampoco «a los que entraron nuevos» y han incumplido «lo que dijeron que iban a hacer».
Rodríguez explicó que hay mucha gente que no participa en política ni en los procesos electorales y por eso es necesario «una fuerza renovada que plantea hacer las cosas de manera diferente».
«Los coqueteos y mirar para otro lado cuando hay atisbos de corrupción» generan «desafección» y alejan a la gente de la participación, manifestó. Por eso, «si la abstención aumenta todavía más corremos el riesgo de que las derechas, las fuerzas conservadoras, entren con fuerza en el municipio».
En su opinión, desde 2019, cuando se constituyeron los pactos de progreso en el Gobierno de Canarias y también en el Ayuntamiento de La Laguna, hay «una desafección muy grande con los políticos en general, con la gente que está en las instituciones y con las promesas y palabras bonitas» que no se traducen en hechos cumplidos.