El PSOE desembarca en Andalucía tras la «caída en picado» de Moreno por Doñana
El PSOE ha detectado una ventana de oportunidad para las municipales del 28-M y también para las elecciones generales
El presidente Pedro Sánchez, junto al secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, y la alcaldesa de Úbeda, Toni Olivares. | EFE
El monotema de Doñana tiene una explicación: los trackings. Según ha podido saber THE OBJECTIVE, el PSOE ha detectado una «caída en picado» del PP de Juan Manuel Moreno Bonilla en sus encuestas que les ofrece una ventana de oportunidad para las municipales del 28-M pero también para las elecciones generales, en las que Pedro Sánchez aspira a recuperar el medio millón de votos que le abandonó en las autonómicas del 19-J. Una caída que motiva el desembarco del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y gran parte de sus ministros en Andalucía, así como como su ofensiva nacional contra la iniciativa de la Junta de Andalucía sobre la realización de sus regadíos en el parque de Doñana.
Ferraz ha tocado a rebato en Andalucía ante las constatación de que la merma de la intención de voto va en consonancia con un repunte de las expectativas de voto del PSOE. «Es un filón para nosotros, lógicamente. Moreno le ha regalado una bandera electoral a Pedro Sánchez», explican fuentes del PSOE andaluz a este periódico, después del pesimismo sobre la convocatoria electoral de mayo porque continuaba la inercia de la derrota de Juan Espadas hace un año.
Los socialistas han detectado una subida del voto urbano, especialmente entre los jóvenes pero también por colectivos profesionales como el primer sector. «Estamos ante una catástrofe medioambiental pero no sólo… Estamos hablando del agua y de la sequía», que genera una enorme empatía en los agricultores andaluces con restricciones como Almería o Jaén. Provincias en las que ha prendido la mecha esta ofensiva gubernamental con la proposición de ley impulsada por la Junta Andaluza para regularizar los regadíos de Doñana: «Todos los candidatos que han intervenido la ultima semana en mi provincia han hablado de Doñana, desde la otra punta de Andalucía… Este tema cala, sobre todo con una ola de calor de 40 grados en abril. Aquí no tenemos agua».
Moreno, «tocado y nervioso»
Un asunto que tiene «muy nervioso» al presidente de la Junta de Andalucia que, a juicio del PSOE, es consciente de la crisis reputacional que este asunto conlleva. Principalmente porque «ha afectado a su imagen de moderado y a sus aspiraciones nacionales. Su entorno está muy preocupado», deslizan fuentes socialistas, sorprendidos ante la beligerancia del presidente andaluz en el último pleno del Parlamento de Andalucía. Un motivo de inquietud se vincula a los medios de comunicación de Andalucía, donde «el 85% de los medios de comunicación, bien regados de subvenciones de la Junta, abren con Doñana. Aquí todo es Doñana».
Pese a todo, la supuesta erosión demoscópica es sólo una fisura de la mayoría absoluta del PP, por la que pretende colarse el PSOE de cara a la posibilidad de recuperar voto para las elecciones generales. Pero asumen que Moreno Bonilla está «tocado pero no hundido». Y recelan de la estrategia de evasión del presidente sobre su metedura de pata. La opción más extendida es que «dejará morir la iniciativa en el trámite parlamentario» porque en el PSOE recelan de una rectificación, ni antes ni después de la campaña electoral del 28-M, porque «si da marcha atrás, se le echarán encima Vox y los agricultores».
En la diana: la diputación de Huelva
Los socialistas admiten que no todo son beneficios. En los cinco municipios afectados, los alcaldes socialistas de Doñana fueron presionados por la dirección del PSOE para no apoyar la propuesta de PP y Vox de legalizar cultivos ilegales hasta la fecha. «Claro que el asunto tiene matices y nuestros alcaldes están con los agricultores, sobre el terreno». El PSOE confirma que «el PP recoge votos», tanto en esos cinco ayuntamientos onubenses -tres gobernados por el PSOE-, como en la disputada Diputación de Huelva, que está en el blanco de la diana electoral de los populares.
En el peor de los pronósticos, la diputación de Huelva, la administración que riega de fondos a los ayuntamientos de la provincia, se sumaría a las tres que ya contaba con perder el PSOE hace meses: Granada, Cádiz y Córdoba. En la dirección regional del PSOE andaluz creen no se cumplirán los peores presagios y que, de las seis diputaciones que tiene el PSOE «alguna podría caer en manos del PP», como Huelva y Córdoba. Esta ultima sería «que más riesgo corre», aunque en el PSOE no perciben «ambiente para que haya un vuelco» en el resto. Por ello, acogen con gran optimismo el desembarco de Moncloa y Ferraz ante la iniciativa del PP con Doñana, porque sirve para cambiar el ánimo de los socialistas y «recuperar una bandera trasversal e intergeneracional» de cara al 28-M y en adelante. «Estamos encantados. Juanma ha logrado lo que a nosotros nos cuesta: ponerse en el foco». Dicho de otra forma, un gol en propia meta.
Ofensiva en Moncloa y el Senado
El filón electoral se puso en evidencia en el pleno de este martes en el Senado, donde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pidió al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que «tire a la basura esa proposición de ley y reconozcan el error porque están perpetrando un atropello contra un pulmón esencial de España». Como lleva haciendo desde hace una semana, con visita a Doñana incluida y Consejo de Ministros monográfico este martes con los ministros Teresa Ribera y Luis Planas desde la rueda de prensa, Sánchez insistió en atizar a Feijóo por «no cumplir con la legalidad europea en Doñana. Impone una proposición ilegal que se carga Doñana. Yo ya sé que ustedes van en dirección contraria a la ciencia, a la Comisión Europea y a la propia Unesco. Pero cuando todos están en posición contraria, a lo mejor son ustedes los que circulan en dirección contraria».
«La soberbia, señor Feijóo, no es aconsejable, pero cuando cabalga a lomos de la ignorancia, es muy peligrosa porque es contagiosa», reprochó Sánchez. Por su parte, el líder popular le acusó de utilizar Doñana como «disparadero electoral» y se mofó del mantra del PSOE de ‘Doñana no se toca’ porque «no se tocó en los 40 años de Gobierno socialista en Andalucía».
