Montero, sobre el expediente de la JEC a Isabel Rodríguez: «Es una campaña de acoso»
La ministra de Igualdad asegura que el Gobierno central es «escrupuloso» en los procedimientos democráticos
La ministra de Igualdad, Irene Montero, durante una sesión de control al Gobierno, en el Congreso. | Eduardo Parra (Europa Press)
La ministra de Igualdad, Irene Montero, considera que la apertura de expediente por la Junta Electoral a la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, forma parte de una campaña de la derecha «política, mediática y judicial» de «acoso y derribo» al Gobierno.
Así lo ha indicado, en declaraciones a los medios de comunicación, tras su visita a la Fundación Mar de Niebla, en Gijón, acompañada de la candidata a la Alcaldía gijonesa, Olaya Suárez, donde ha señalado que es preciso trabajar y ser valientes para garantizar derechos como Gobierno. «Gobernar, gobernar y gobernar», ha asegurado que es el cometido del Ejecutivo central hasta que termine la Legislatura.
De ahí que sea importante, a su juicio, que Podemos forme parte del Gobierno central, así como de los municipales y autonómicos, y que sean capaces de transformar para garantizar derechos frente a una derecha «política, judicial y mediática».
Como ejemplo, ha citado el bloqueo de la renovación del Consejo General del Poder Judicial. Incluso ha asegurado que se ha producido en el país un «golpe judicial al prohibir una votación legítima del Poder Legislativo, del Senado, por parte del Tribunal Constitucional, de la derecha judicial del Tribunal Constitucional».
Por ello, ha visto preciso defender la Democracia y ha sostenido que el Gobierno central es «escrupuloso» en los procedimientos democráticos
Sobre la retirada del acta de diputada a Laura Borràs, la titular de Igualdad ha señalado que Junts está «muy solo» entre los propios partidos con representación en el Parlamento de Cataluña.
A su juicio, sí debería abandonar el escaño, no por esta última comunicación de la Junta Electoral, sino desde antes, porque hay una «sospecha fundad» de corrupción», a lo que ha insistido que Junts está «bastante solo» entre los propios partidos catalanes.
