Llop y Hernando tampoco irán en listas y completan la «desbandada» del Gobierno
La ministra de Justicia y el adjunto del gabinete se suman a Calviño al descartar ser candidatos. Volverán a la judicatura o a «ganar dinero»
Es un comportamiento que la ciencia no alcanza a explicar pero existe: segundos antes de que estalle un volcán o un terremoto, los pájaros se agitan y sobrevuelan ruidosos, demostrando una inquietante capacidad anticipatoria de la catástrofe. Algo así parece estar ocurriendo en el Palacio de la Moncloa. Según revelan miembros del Consejo de Ministros a THE OBJECTIVE, hay «desbandada» en el Gobierno ante la expectativa de que el resultado del 23-J se convierta en un nuevo tsunami electoral que arrase hasta a Pedro Sánchez en la Moncloa. Tras el descarte de la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, la retirada afecta ahora a la titular de Justicia, Pilar Llop, que no irá en las listas del PSOE para las elecciones generales.
Llop fue cabeza de lista por Madrid al Senado en 2019 y ni tiene intención de repetir, ni Sánchez quiere que repita. Se trata de una de las ministras que «más se ha quemado» en esta legislatura, principalmente por la ley del sólo sí es sí, cuyo enfrentamiento con Irene Montero y la fallida negociación en la coalición para la reforma de la norma, que provocó más de un millar de rebajas de condena a agresores sexuales, le pasó factura a la responsable de la cartera. La huelga de funcionarios de Justicia ha acabado por darle la puntilla. Moncloa lleva meses señalando que Llop está «en la cuerda floja» y se llegó incluso a señalar su salida del Ejecutivo antes de la reciente crisis de Gobierno.
El pasado mes de febrero, la propia Llop asumió «en primera persona la responsabilidad por lo que pudiera pasar». Una declaración solemne y compungida que fue interpretada internamente como «una despedida». De hecho, en el PSOE recuerdan el enfado del presidente del Gobierno porque inicialmente la ministra «se puso de perfil» durante los meses previos a esa declaración desde el inicio del goteo de excarcelaciones y rebajas de condenas por la aplicación de la Ley de Libertad Sexual y Reproductiva. Sin embargo, en Podemos creen que se trató de una estrategia para forzar la caída de Irene Montero y Ione Belarra que evidenció que Sánchez estuvo dispuesto a sacrificar a su ministra de Justicia.
Antonio Hernando volverá a Acento
A los casos de Calviño y Llop se les suma un tercero: el de Antonio Hernando, el jefe de la unidad de Estrategia en Moncloa, director adjunto del jefe de gabinete, Óscar López, a quien le ha acabado haciendo sombra, según fuentes socialistas. Hernando siempre fue «el listo» de los llamados ‘chicos de Blanco’, el ex secretario de Organización del PSOE y actual presidente de Acento, José Blanco. Un grupo integrado también por el propio Pedro Sánchez y Óscar López, del que Hernando era el alumno aventajado. Pero su abandono de la política fue abrupto, casi traumático, tras haber ocupado el puesto de portavoz parlamentario de Sánchez y plegarse a la gestora que derrocó a su secretario general gracias a su participación. Una ‘traición’ que a Sánchez le costó perdonar pero, gracias a un intermediario, se cosieron las heridas y se integró en Moncloa. Según fuentes socialistas, «Hernando no volvió a la primera» sino que se le ofreció una primera vez que rechazó por motivos personales. Pero la segunda oferta «no la pudo rechazar» y abandonó Acento para incorporarse como adjunto al gabinete en el Palacio de la Moncloa.
Desde hace meses se viene especulando con su protagonismo en Moncloa. Hasta el punto de que el PSOE le esperaba con «mando en plaza» en la ultima remodelación del partido en julio del 2022. Muchos le ubicaban como cabeza de lista por Almería, ciudad en la que residía hasta el año pasado y en la que veranea desde hace años. Sin embargo, fuentes cercanas niegan este extremo porque aseguran que «no irá como diputado al Congreso y quiere volver a la empresa privada», concretamente a sus funciones en Acento, donde tiene «un sitio reservado».
Quienes avanzan este retorno empresarial de uno de los hombres de confianza de Sánchez dan cuenta de su perfil discreto y casi secreto en Moncloa y en el PSOE: «Nadie sabe que está ahí. No aparece por Ferraz. ¡Ccon lo que ha sido Hernando allí! No acompaña en mitines» al presidente. El motivo es que «le costó mucho meter la cabeza» en su vuelta a Moncloa porque «el partido y los sanchistas no le han perdonado aún su traición. Aunque quisiera no podría volver al Congreso porque todos recuerdan su papel». La previsión de una derrota facilita el camino de vuelta a quien nunca quiso realmente volver pero se sintió obligado a hacerlo.
‘Overbooking’ en Madrid
El movimiento de quienes dan un paso atrás para presentarse en las listas contrasta con las tensiones que se están produciendo para encajar la lista cremallera del PSOE en Madrid, donde todos quieren buscar cobijo. Una candidatura que encabeza el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, haciéndose acompañar por varios de sus ministros: el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, irá previsiblemente en la primera posición, por detrás del presidente Sánchez, en la cuota masculina, como adelantó este periódico. Tras el descarte de Calviño, Sánchez sopesa repetir la operación de 2016 y poner de número dos a la ministra de Defensa, Margarita Robles, operación que entraña un gran simbolismo. Otra ministra que repetirá en la lista será la vicepresidenta cuarta, Teresa Ribera, en puestos de relevancia, dada su pertenencia al Consejo de Ministros.
Un overbooking para esta convocatoria electoral que se registra pese al desalojo de pesos pesados que ocuparon la candidatura en 2019. Como adelantó este diario, la ex vicepresidenta Carmen Calvo no repetirá en las listas, pese a que fue número dos por Madrid hace cuatro años. Tampoco volverán a integrarse el actual director del Consejo Superior de Deportes, José Manuel Franco; la ex fiscal general del Estado, Dolores Delgado; la exministra de Industria, Reyes Maroto; la actual presidenta de Red Eléctrica, Beatriz Corredor, y el dirigente madrileño, Daniel Viondi.
Son huecos que ocuparían otros nombres muy vinculados con Madrid, como el delegado del Gobierno, Fran Martín, muy cercano a Bolaños; el secretario de Estado de relaciones con las Cortes, Rafael Simancas; la presidenta del partido en Madrid y secretaria general del grupo socialista, Isaura Leal, y Pilar Sánchez Acera, actual directora de gabinete de Óscar López y reconocida militante del PSOE de Madrid. Otro nombre que suena con fuerza es el de la actual secretaria ejecutiva de Cultura del PSOE, Manuela Villa.