Génova cierra filas con su candidata extremeña: "No hay desacato, lo está haciendo muy bien"
El PP aplaude la estrategia frente a Vox: «No esperamos que diga en Extremadura ‘haré lo que Génova dice’. Así entendemos nosotros la política»
La firme intención del Partido Popular de no pactar con Vox en comunidades donde la diferencia de votos es muy grande, como el caso de Extremadura (28 PP y 5 Vox), está despertando un gran interés por la contundencia de la líder regional, María Guardiola, que se está interpretando como un pulso con la dirección nacional de los populares. Su afirmación, «nadie de Madrid va a decirme lo que tengo que hacer con un resultado histórico, mis únicos jefes son los extremeños», ha levantado suspicacias sobre si es un desafío a la autoridad del presidente, Alberto Núñez Feijóo.
Sin embargo, nada más lejos de la realidad, ya que las fuentes de la dirección nacional consultadas por THE OBJECTIVE respaldan totalmente sus declaraciones asegurando que están en la línea de lo que Feijóo está afirmando y que hace muy bien en «en buscar una táctica que refuerce su perfil y que proteja a su electorado en Extremadura, que prefiere escuchar estas cosas a que diga ‘haré lo que me diga Feijóo’. El PP no espera de María que diga en Extremadura ‘haré lo que Génova diga’. Así entendemos nosotros la política. No nos sentimos amenazados, ni acomplejados. No hay ningún problema».
Estas fuentes advierten sobre la posición de la candidata extremeña que «si la dirección nacional le hubiera dicho que no gobierne porque no ha ganado y María Guardiola dijera sí que gobierno, habría un desafío, pero no ha pasado. Genova lo que le ha dicho al PSOE es que no nos diga nada de los pactos con Vox porque le ofrecimos la lista más votada y no lo habéis querido».
«No hay ningún descontento»
La dirección nacional no deja ninguna duda sobre el apoyo total a María Guardiola, al afirmar que «lo que dice María, que es que va a hacer lo que corresponde, de una manera semántica muy intensa, lo hace muy bien». En este sentido, señalan que «no hay absolutamente ningún descontento. Lo que pasa es que intentan utilizar la propuesta del pacto de la lista más votada de forma torticera: ‘como Feijóo dice lo de la lista más votada, se lo dice a María Guardiola’. No, se lo dice al PSOE que, como no ha querido este acuerdo, ahora estamos habilitados a formar gobierno donde consideremos oportuno. El debate de María no es con Feijóo, es con Vox, si la dejan gobernar sin pactos o le exigen entrar en el gobierno. Ahí está el foco del asunto».
Génova interpreta que el movimiento de Guardiola frenando a Vox, le ha dado «una posición de fuerza respecto a Vox y nos parece bien. María se ha quedado a seis mil votos de Vara y le dice a Vox: ‘Yo he empatado con el PSOE en escaños, déjame gobernar y no me pidas nada’. Es una negociación entre María y Vox, ya dijimos que la negociación iba a ser en el ámbito autonómico. Por eso, está lejos de estar en una situación de desacato o desafío, como se dice interesadamente».
Los populares insisten en que hay dos focos distintos en la política nacional: «El de María con Vox para conseguir la investidura y el del PP con el PSOE por la lista más votada; o sea, entre Feijóo y Sánchez, porque si hubiera habido acuerdo sobre la lista más votada el PSOE podría gobernar en Extremadura y el PP en algunas ciudades que vamos a perder. Nosotros buscamos que María gobierne en minoría y en eso coincidimos al cien por cien con ella».
El Partido Popular ve «estupendo» que «la izquierda mediática crea que nos preocupa que digan que María no quiera gobernar con Vox y que Feijóo está incómodo con eso porque refuerza el perfil centrista y moderado de Feijóo». Estas fuentes de la dirección nacional recuerdan que la candidata extremeña «es una apuesta del presidente que ha salido muy bien y es un territorio conquistado, que no es cualquiera, un feudo histórico del PSOE. La relación con ella es perfecta y se ha buscado la polémica donde no la hay. Han buscado la tensión como si Feijóo le hubiera dicho a María que no gobernara porque no es la lista más votada. Es de locos».
La estrategia de Guardiola, que tanto ha sorprendido por el ímpetu de sus declaraciones, es plenamente aceptada por la dirección nacional: «Esa posición de fuerza igual le ayuda a que uno de los dos partidos acceda a investirla presidenta sin necesidad de nada más. Es una táctica de ella. No nos preocupa nada, muy tranquilos con ella».