Asens ve margen para aprobar una ley de amnistía antes de poder investir Sánchez
El diputado cree que la mediación podría ejercerla «una figura de prestigio» o un equipo de personas
El dirigente de En Comú Podem y miembro del equipo negociador de Sumar con Junts, Jaume Asens.
El dirigente de En Comú Podem y miembro del equipo negociador de Sumar con Junts, Jaume Asens, ha considerado este jueves que hay margen para aprobar una ley de amnistía antes de una posible votación para investir a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno si fracasa la del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo.
«Hay margen a través de un procedimiento de lectura única. Es forzar un poco los ritmos, pero es posible. Es lo que sucedió con la reforma de la sedición», ha recordado en una entrevista en el canal 3/24 recogida por Europa Press.
Tras las críticas del expresidente socialista del Gobierno Felipe González y del exvicepresidente Alfonso Guerra a la amnistía, Asens ha advertido de que «negar la legitimidad de la amnistía es negar la legitimidad del régimen de 1978».
«No hay ningún país europeo que prohíba las amnistías», ha recalcado el dirigente de En Comú Podem, que ha defendido el diálogo con Junts y ha señalado que hasta el PP, según él, ha legitimado hablar con el partido del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont.
Caso Borràs
Al preguntársele si en la posible ley de amnistía debería incluirse el caso de la expresidenta del Parlament Laura Borràs, Asens cree que supondría «un problema con el TC a la hora de argumentar la posible vulneración del principio de igualdad, y sería una ley de amnistía mucho más débil».
«Si se ponen casos como los de Borràs también puedes poner casos como los de Jordi Pujol y otros», ha sostenido, además de añadir que ERC y la CUP están en contra de ello y que el caso de la expresidenta del Parlament tampoco figura en el inventario de casos hecho por Òmnium Cultural.
Mecanismo de mediación
En relación al mecanismo de mediación que Puigdemont reclama, ha explicado que hablaron de ello en la reunión que mantuvo con la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, y cree que podría ejercerlo «una figura de prestigio» o un equipo de personas encargadas de coordinar o facilitar los trabajos que se lleven a cabo.
«Esto es positivo. Otra cosa que se plantee una mediación internacional. Es extraño porque las mediaciones internacionales son en conflictos armados, en procesos de paz, no en una simple negociación entre partidos, que no será simple. Esto tiene que ver con un elemento de desconfianza», ha subrayado.
