El CIS desvela un rechazo casi récord al Gobierno y a los partidos políticos
El cambio de metodología impulsado por Tezanos no tapa la desafección ciudadana hacia gobernantes y legisladores
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat catalana, Pere Aragonès. | Agencias
La percepción del Gobierno y los partidos como un problema de España creció en los primeros días de noviembre, cuando el PSOE negociaba la amnistía y la investidura de Pedro Sánchez, y marcó su segundo récord en la serie histórica de los barómetros del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), figurando en un 13,2% de los cuestionarios. Sin embargo, ese dato no se publicó en el avance de resultados que se dio a conocer el pasado 10 de noviembre.
Y es que el instituto público que preside José Félix Tezanos difundió aquel avance sin identificar las «otras respuestas» espontáneas de los entrevistados, un conglomerado que en ese estudio llegaba casi al 90% y el mes anterior sólo representaban un 3%. Pero ahora el CIS ha publicado completo el Barómetro Opinión de Noviembre y ‘el Gobierno y los partidos o políticos concretos’ han emergido como sexto problema nacional, incrementando en 3,7 puntos su porcentaje del mes anterior y marcando un 13,2%, su máximo desde abril de 2022. En aquella fecha esta categoría alcanzó su récord histórico, un 15,7%, también en la sexta posición de la tabla, en la que ha repetido después en varias ocasiones.
Los cambios de Tezanos
Las referencias a los políticos como un problema venían figurando en las encuestas del CIS en sólo dos categorías: una genérica -‘la clase política’- y otra relativa a Gobierno y partidos. Sin embargo, después de que en diciembre de 2019, la clase política pulverizara todas sus marcas y rozara el 50% de menciones, el CIS modificó estas etiquetas.
Tras aquel 49,5% de menciones en diciembre de 2019 que confirmaban a los políticos como el segundo problema del país por detrás del paro, el equipo que dirige el sociólogo socialista decidió eliminar ese término genérico de ‘clase política’ en el barómetro de enero de 2020 y quiso concretar ese malestar incluyendo otras tres etiquetas separadas, ninguna de las cuales superaba ya el 25%.
Esas tres nuevas categorías eran: ‘Los problemas políticos en general’, ‘El mal comportamiento de los/as políticos/as’ y ‘Lo que hacen los partidos políticos’; que se sumaban a la de ‘Gobierno y partidos’ que se mantenía. En barómetros posteriores fueron apareciendo otras, también relacionadas con la política como ‘la falta de acuerdos, unidad y capacidad de colaboración. Situación de inestabilidad política’ o ‘los extremismos’.
Tres en el top ten
Pero, casi cuatro años después de aquellos cambios, tres de las etiquetas que recogían el malestar con la clase política se han acabado consolidando en el ‘top ten’ de los problemas nacionales. Así, los ‘problemas políticos en general’ alcanzaron su máximo el pasado mes de octubre (30,9%) arrebatando al paro la segunda plaza de la lista. En estos casi cuatro años ‘el mal comportamiento de los políticos’ ha ido saltando entre la séptima y cuarta plaza. Esa fue la que logró en octubre, con un 12,5%, aunque llegó a cosechar un 23,9 en junio de 2020, en plena pandemia.
‘El Gobierno, los partidos y los políticos concretos’ que antes del cambio de categorías solía tener una presencia constante del alrededor del 3% -salvo en octubre de 2019, en pleno bloqueo por la falta de acuerdo para la investidura, cuando marcó récord con un 8,4%-, llegó al 15,7% en abril del año pasado y en el barómetro completo de noviembre se ha quedado en el 13,2%, en ambas ocasiones como sexto problema.
Además, la actualización del Barómetro de Opinión de noviembre, recoge también otras categorías que quedaron fuera del avance de resultados como ‘los extremismos’ (2,4%), la independencia de Cataluña, que figura con un 1,5% tan sólo una décima menos que el mes anterior, y los nacionalismos, que también caen una décima, hasta el 2,9%.
