Sánchez, al PP: «La gran mentira del 11-M es el acta fundacional de su proyecto político»

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reaparecido este martes en la sesión de control en el Senado, después de diez meses sin presentarse y ha esgrimido la gestión de Aznar sobre el 11-M para evitar responder a la trama de Koldo García. Y lo ha hecho con un duro cara a cara con la portavoz del Partido Popular (PP), Alicia García, en mitad de la polémica por el caso Koldo por el presunto cobro de comisiones por la venta de mascarillas, por parte del asesor del exministro de Transportes. En un momento del debate entre el presidente y la portavoz popular, Sánchez ha sacado a colación el 11-M afirmando que esta tragedia, «la gran mentira del 11-M, es el acta fundacional de su proyecto político de destrucción». La portavoz del PP le había preguntado «sobre si el presidente del Gobierno puede explicar qué estabilidad política ofrece su Ejecutivo».

Con esta dura consideración, el presidente del Ejecutivo respondía a la intervención de la dirigente popular, que había definido a Sánchez como un «títere de un prófugo de la Justicia» y de escribir «las peores hojas de la Historia de España. «Va a pasar a la historia como el presidente que blanqueó a los herederos de ETA, soltó a la calle a violadores y pederastas y el presidente que lo sabía todo, y lo tapó», ha asegurado García.

En este sentido, la portavoz del PP reprochó a Sánchez que fuera un «presidente humillado, extorsionado por la corrupción» , asegurando que «la trama de corrupción nace en su partido y se extiende como una mancha de aceite por su Gobierno».

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La sesión de control se ha desarrollado en un ambiente de crispación y de duras descalificaciones. Un momento de máxima tensión se produjo en la pregunta del diputado popular y secretario general del PP de Madrid, Alfonso Serrano, al ministro de Trnasportes, Oscar Puente, sobre «los motivos que llevaron al Gobierno a nombrar consejero de Renfe Mercancías y vocal del Consejo Rector de Puertos del Estado a Koldo García Izaguirre».

Puente le respondió con la polémica originada con la pareja de Ayuso acusado por la Fiscalía por presuntamente defraudar a Hacienda, subrayando que es «el patrón de conducta que sigue la familia Ayuso» y evitó, como hizo Sánchez, entrar a pronunciarse sobre la trama Koldo, y aludió al presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo.

Serrano replicó que «Koldo es la punta del iceberg, el Ministerio de Sanidad, de Interior, los gobiernos de Baleares y Canarias. El problema del PSOE es la corrupción que lo llevan en el ADN». Además, le advirtió de que «da igual que utilicen todo el aparato del Estado que no nos van a callar en denunciar la mayor trama de corrupción que afecta a su Gobierno y su partido».

La corrupción que acecha al Gobierno y al PSOE también protagonizó el enfrentamiento entre el senador popular José Antonio Monago y el ministro Óscar Puente. Monago le preguntó «sobre si el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible considera que para dar respuesta al escándalo en relación con la adquisición de mascarillas en su ministerio es suficiente el encargo de dos auditorías a dos empresas públicas dependientes del mismo». Puente le respondió que «contra la corrupción nada es suficiente«.