Vox explota el «colaboracionismo» del PP con el PSOE de cara a las catalanas y europeas
Los de Santiago Abascal usan la negociación para renovar el CGPJ y las votaciones en Bruselas para erosionar al PP
El líder de Vox, Santiago Abascal. | J.P. Gandul (EFE)
Santiago Abascal no da puntada sin hilo. Por eso no ha sido casual que este mismo lunes, después de que Pedro Sánchez anunciara que se atrinchera en Moncloa «por la regeneración democrática» de España, el líder de Vox leyera una declaración institucional instando al PP a romper «toda negociación, empezando por la renovación del Consejo General del Poder Judicial» con los socialistas, pero también «la alianza entre PP y PSOE en Europa». Una pulla a los populares en vísperas de las elecciones catalanas y europeas que se celebran los próximos 12 de mayo y 9 de junio, respectivamente.
Se trata del mismo argumentario que Vox explotó en la campaña del 23-J, sirviéndose de unas declaraciones del vicesecretario de acción institucional del Partido Popular, Esteban González Pons, blasonando de que en Bruselas son coalición «desde hace mucho tiempo» con el Partido Socialista y con Los Verdes, «y seguiremos siendo coalición», advirtió. Y es que desde julio de 2019 hasta este pasado mes de enero, PP y PSOE votaron igual el 87,8% de las veces y distinto el 12,2% (en un total de 1.709 votaciones de informes).
El argumentario, más bien aparcado en las gallegas y vascas, ha sido recuperado ahora para extender la idea de que el PP participa de un «colaboracionismo», en palabras de Abascal, con el PSOE. Así lo han verbalizado también otros prebostes del partido como Jorge Buxadé, que ha incidido en la idea de que el próximo 9 de junio los españoles votan «romper esa coalición de populares, socialistas y verdes que ha actuado como coartada y protección de Sánchez».
Frente a esa «coalición», Vox se presenta como la «oposición real» al Gobierno de Pedro Sánchez. «Ahora más que nunca trabajaremos sin descanso para liderar la resistencia y construir una alternativa liderada por Santiago Abascal. El 12-M tenemos la oportunidad de dar el primer paso en Cataluña», ha publicado también Ignacio Garriga, cabeza de lista a las catalanas, evidenciando que el próximo ciclo electoral va a tener también un marcado componente nacional. Y en este contexto, los conservadores aspiran a explotar su «distancia infinita» con el Ejecutivo.
En ese contexto, cobran sentido las palabras de Abascal culpando a Sánchez de una «reafirmación de su golpe contra la unidad de España, la convivencia, el Estado de derecho, la separación de poderes y la libertad de prensa», y atribuyéndole que cuando habla de «regeneración democrática» se refiere a una persecución contra «jueces independientes, medios libres y oposición» con la que «sepultar la crítica y garantizarse la impunidad para sus crímenes, mentiras y corrupciones».
No obstante, las palabras de Alberto Núñez Feijóo no se han quedado atrás en contundencia, y el líder popular ha acusado al presidente socialista de pretender «colar un cambio de régimen detrás de esta obra de teatro». Feijóo, además, reúne este martes a los grupos parlamentarios del Congreso y el Senado. Pero eso no será suficiente para los de Abascal, que explotarán su «colaboracionismo» siempre y cuando siga negociando al renovación del CGPJ y no evidencie una voluntad de cambio en el sentido de sus votaciones en el Parlamento Europeo.
Expectativas electorales
Las expectativas electorales de Vox en estas dos citas han sido explicadas con anterioridad por THE OBJECTIVE. Para las catalanas, los de Ignacio Garriga aspiran a aguantar la subida del PP de Alejandro Fernández y «no caer al unidígito», manteniendo, a ser posible, los once diputados que obtuvieron en 2021 y creciendo, incluso, en número de votos, aunque se da por hecho el sorpasso del PP.
Los más optimistas en Vox se fijan en los resultados obtenidos en la región en las elecciones generales del pasado 23-J, cuando Vox cosechó 273.023 votos, el 7,76%, por encima de los 218.121 obtenidos en las autonómicas de 2021.
Con respecto a las europeas, Vox confía en que supongan esa victoria moral que necesitan tras los fracasos concatenados en las pasadas elecciones generales y gallegas. La formación conservadora, que ha vivido unos meses convulsos desde el pasado 23-J, podría subir de cuatro a cinco-siete eurodiputados. Todo lo que no sea superar sus resultados de 2019, cuando apenas tenían estructura de partido y tenían todo por hacer a nivel interno, sería muy difícil de vender como un éxito.
Con este objetivo han acometido el fichaje del mediático Juan Carlos Girauta, y se han centrado en proyectar la labor de Jorge Buxadé, que repetirá como cabeza de lista, a la hora de impulsar medidas contra la inmigración ilegal en el Parlamento Europeo. La aparición otros partidos contrarios a la Agenda 2030 genera inquietud, pero desde Vox confían en que se mejorarán los resultados de 2019.
