El PP balear 'traiciona' a Vox y pacta con el PSOE colgar la bandera LGTB en el Parlament
Los populares pactan con la izquierda pese a que tenían un acuerdo para no colgar símbolos no oficiales sin unanimidad
El Partido Popular ha traicionado a Vox en Baleares. Ambas formaciones tenían un acuerdo no escrito para que no cuelguen del Parlament banderas distintas a las oficiales sin unanimidad en la Mesa, compuesta también por el PSOE. Este ha sido roto de manera unilateral por los populares, que han votado a favor de la propuesta de MÉS per Mallorca para que la bandera arcoíris cuelgue el Día del Orgullo LGTB, que se celebra el próximo 28 de junio.
El presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne, ha convocado este jueves a los medios de comunicación a una rueda de prensa en la que ha expresado su «decepción absoluta» con la «traición en toda regla» del PP, que no ha atribuido a Mauricio Rovira, sino a «órdenes que ha recibido de arriba». Fuentes de Vox indican que se trataba de un «acuerdo verbal», y que habían recibido «solicitudes que no hemos aceptado porque estamos en contra de colgar símbolos divisivos». Los populares, por otro lado, no han negado esa versión a este medio.
El año pasado, el propio PP de Marga Prohens se negó a esta medida, y defendió públicamente que en la fachada del Parlament solo deben lucir los símbolos oficiales, añadiendo que la Mesa del Parlament daba el visto bueno a que sean los grupos los que en las ventanas o los balcones de sus dependencias pudieran desplegar emblemas conmemorativos en fechas señaladas.
La colocación de la bandera LGTB en la fachada de los parlamentos regionales con motivo del Día del Orgullo está siendo un casus belli entre PP y Vox. Así ha sucedido también la Comunidad Valenciana: los populares votaron a favor de colgarla en las Cortes Valencianas con la oposición de la presidenta de la cámara, Llanos Massó (Vox), y la abstención de PSPV y Compromís, que califican la propuesta de “descafeinada” (querían que en representantes trans colgaran la bandera).
Massó compareció también ante los medios para explicar la posición unificada del partido a este respecto: «Nuestra posición es votar que no a este tipo de acciones. Los edificios públicos no son el lugar para colgar banderas que no son las institucionales». Y es que en Vox «no son partidarios de colectivizar a las personas».
No sólo Vox, sino que el feminismo clásico también se opone a que la bandera LGTB cuelgue de edificios institucionales, por cuanto «no es simbología oficial» y va «contra los derechos de las mujeres». La Alianza Contra el Borrado de las Mujeres, que aglutina a centenares de colectivos feministas, ha insistido en este tema cuando el Ministerio de Igualdad ha exhibido la bandera arcoíris en su fachada.