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Política

Expulsan de un partido al secretario LGTBI del PSOE por mandar «a tomar por culo» al árbitro

Un árbitro de waterpolo multa con 200 euros a Víctor Gutiérrez por decirle: «Vete a tomar por culo, hijo de puta»

Expulsan de un partido al secretario LGTBI del PSOE por mandar «a tomar por culo» al árbitro

El secretario LGTBI del PSOE, Víctor Gutiérrez. | PSOE

El secretario LGTBI del PSOE, Víctor Gutiérrez, jugador de waterpolo de División de Honor, fue expulsado el pasado 13 de marzo en un partido entre el Real Canoe (equipo al que representa) y el Santa Cruz de Tenerife por mandar «a tomar por culo» al árbitro, al que también se refirió como «hijo de puta». Así se desprende del acta arbitral, a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE.

Esta recoge cómo Gutiérrez Santiago fue castigado con dos partidos de sanción y una multa de 200 euros por «menosprecios al árbitro» de manera «reincidente». Concretamente, en el minuto 1:21 del tercer periodo, el waterpolista socialista fue expulsado por protestar una decisión del árbitro, al que gritó: «Vete a tomar por culo, hijo de puta, vete a tomar por culo». Después del partido, admite el acta arbitral, se acercó a decirle que «en 15 años nunca me habían pitado así» y que el arbitraje había sido injusto, pero terminó disculpándose por su comportamiento.

El joven diputado socialista, que ya había sido expulsado con anterioridad esta temporada en un partido ante el CN Rubi, no hizo uso del trámite de audiencia previsto en el artículo 31 del Libro V, Régimen Disciplinario RFEN Aquatics, y no presentó ningún tipo de prueba ni alegación contra la redacción del acta arbitral. Esto es, asumió el castigo interpuesto por el árbitro sin rechistar.

Víctor Gutiérrez

Antes de dar el salto a la política, Víctor Gutiérrez era uno de los waterpolistas españoles más laureados. No en vano, tiene los títulos de subcampeón de Europa sub-18, subcampeón del mundo sub-20, subcampeón de la Copa del Rey en 2013 y 2020, y fue el máximo goleador de la División de Honor las temporadas 2016/17, 2017/18 y 2018/19. Ha sido internacional en más de 70 ocasiones con la Selección de waterpolo de España, con la que jugó el Mundial del año 2017 en Budapest.

En la última temporada, que ha compatibilizado por primera vez con su acta de diputado, ha disputado doce partidos en los que ha metido 17 goles, cinco de ellos de penalti, y ha sido expulsado con sanción en dos ocasiones.

Lejos del deporte, es graduado en Periodismo y Comunicación Audiovisual. En 2016 hizo pública su homosexualidad, convirtiéndose, según dice de sí mismo en su página web, «en el primer deportista profesional de deporte en equipo abiertamente gay en la historia de España»: «El objetivo era romper el tabú existente dentro del deporte, y compartir mi experiencia positiva en la élite de la competición, transmitiendo los valores del respeto, la tolerancia y la diversidad».

Perfil incendiario

Pero este currículum y estas proclamas contrastan enormemente con su belicosidad en redes sociales. Esta semana, sin ir más lejos, se ha enzarzado en X con el asesor en el Senado del PP Víctor Soriano, que le ha acusado de «comentarios homófobos» por ser «gay y de derechas». 

Su falta de contención en esta red social le ha supuesto más de un sobresalto al PSOE, partido del que es secretario de Políticas  LGTBI desde finales de 2021. En 2022, tal y como contó este medio, sus mensajes agresivos contra las feministas clásicas del partido desde algunas cuentas oficiales del partido motivó el cierre de las mismas, aunque desde Ferraz se escudaron inicialmente a que este movimiento -el cierre- se debía a la «racionalización de las cuentas del partido».

Lo que en realidad sucedió es que Víctor Gutiérrez publicó un tuit acusando a las veteranas socialistas Carmen Calvo y Amelia Valcárcel de «terfs» o «terfas», sinónimo de «tránsfobas». El mensaje incendió las redes sociales con la intervención de las feministas al rescate de las históricas dirigentes del PSOE, desde Elena Valenciano a Ángeles Álvarez o Laura Seara. Una revolución tuitera contra la metedura de pata del secretario ejecutivo del PSOE que motivó la intervención del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para llamar al orden a su responsable LGTBI. Un toque de atención en forma de clausura de las cuentas de Twitter de las secretarías de área del PSOE, concretamente las de Igualdad y LGTBI.

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