Interior oculta cuántos hombres se han colado en el sistema VioGén con la 'ley trans'
La Policía se niega a aclarar cuántos varones están en el registro de mujeres maltratadas escudándose en la seguridad
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la ministra de Igualdad, Ana Redondo, durante un Comité de crisis institucional ante el repunte de asesinatos por violencia de género. | Europa Press
Desde que entró en vigor la ley trans se han registrado casos de varones que se han inscrito como mujeres maltratadas en el registro de protección del Ministerio del Interior, conocido como sistema VioGén, en el que durante veinte años exclusivamente se inscribía a mujeres en peligro de ser agredidas por hombres. Sin embargo, y a preguntas de THE OBJECTIVE, el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska se niega a especificar cuántos se han colado, alegando para su opacidad razones de seguridad pública.
Fue el diario El Mundo el que advirtió el pasado mes de mayo de cómo dos varones se habían registrado en un espacio reservado a mujeres maltratadas gracias a la norma estrella del Ministerio de Igualdad en la etapa de Irene Montero. Esta les permitió entrar en VioGén pese a no haberse cambiado siquiera de sexo registral. Lo hicieron alegando sin más que se sentían identificados con su sexo no biológic
Esto fue posible porque la Secretaría de Estado de Interior dio directrices a sus agentes para, con arreglo a lo dispuesto en la ley trans, otorgar la protección reservada a mujeres a hombres sin siquiera tener que someterse a un cambio de sexo registral; simplemente reclamándola con la credibilidad suficiente a los policías en el momento de denunciar a su pareja por violencia de género. Queda entonces a disposición del «agente protector» de turno hacerlo o no.
Opacidad de Interior
Por este motivo, este medio preguntó a Interior cuántos hombres habían utilizado la ley trans para introducirse en el sistema VioGén. La respuesta, elaborada por José Antonio Rodríguez González, se remite a que proporcionar dichos datos supondría «un perjuicio para la seguridad pública y para la prevención, investigación y sanción de los ilícitos penales, administrativos o disciplinarios».
Esto, a pesar de que THE OBJECTIVE no había preguntado por la identidad de estos hombres, sino simplemente por la cuantía. «¿Cuántas autorizaciones ha concedido la Policía para inscribir como mujeres maltratadas en el sistema VioGén a hombres que no han cambiado de sexo en el Registro Civil?». También se pidió que la cifra se desglosara por comunidades autónomas.
La opacidad del Ministerio del Interior en todo lo relativo a la aplicación de la ley trans es recurrente. Hay numerosos ejemplos. El más nítido es el que tiene que ver con presos que se han declarado mujeres para ser trasladados a módulos femeninos. La Alianza Contra el Borrado de las Mujeres ha solicitado que se especifique cuántos reos se han acogido a la ley trans para esto mismo, pero el gabinete de Marlaska arguye que responder violaría la ley de protección de datos.
Más problemas con la ley
La entrada en vigor de la ley trans ha traído consigo otros quebraderos de cabeza a Interior. Por ejemplo, los boletines estadísticos comienzan a recoger anomalías como consecuencia de elaborarse con el sexo registral, y no el de nacimiento. Por ejemplo, que las agresiones sexuales con penetración cometidas por mujeres se han multiplicado por siete en cuatro años, pasando de 25 en 2019 a 174 en 2023. Esto es, se han disparado un 700% en menos de un lustro.
Las feministas clásicas critican que de este modo se está produciendo la «falsificación estadística» sobre los autores o las víctimas de un delito. «Si los boletines estadísticos del Ministerio del Interior solo recogen el dato del sexo registral, y considerando que este puede no coincidir con el sexo real, se estaría ocultando información relevante para la elaboración de los perfiles criminológicos y permitiendo la falsificación estadística sobre el sexo real de los autores o las víctimas de un delito».
