THE OBJECTIVE
Política

El politólogo que explica a la derecha cómo combatir el «lenguaje totalitario» de la izquierda

En ‘Venenosos’, Óscar Rivas defiende que hay que dar la batalla lingüística «por la supervivencia del mundo libre»

El politólogo que explica a la derecha cómo combatir el «lenguaje totalitario» de la izquierda

El politólogo Óscar Rivas sostiene un ejemplar de su último libro, 'Venenosos: cómo combatir el lenguaje totalitario de la izquierda'. | Víctor Ubiña

El tablero político está inclinado, ¿cómo se equilibra? La respuesta anida en el libro Venenosos: cómo combatir el lenguaje totalitario de las izquierdas, del politólogo y experto en comunicación Óscar Rivas. La tesis principal es que la izquierda habla como piensa y la derecha habla como piensa la izquierda, comprando su marco ideológico. Para cambiar el paradigma, la derecha debe empezar a utilizar un lenguaje propio, audaz, y así «desenterrar lo que el malvado entierra». En la guerra cultural la principal batalla es la lingüística.

«Quien nombra manda» es uno de los aforismos que nos regala el autor. El pensamiento se moldea a través de las palabras: «La izquierda ha creado una realidad paralela: los sindicatos se preocupan por los trabajadores, los empresarios son egoístas, el expolio fiscal es solidaridad, la discrepancia es delito de odio, la venganza es memoria histórica…». La izquierda ha «colonizado» el lenguaje por incomparecencia del rival, demonizado con anatemas como «ultra» o «duro».

«La derecha no da miedo, pero la izquierda consigue que lo dé», explica Rivas. Mientras la derecha se enfrasca en intensos y abstrusos debates, a la izquierda le basta una palabra, siempre descalificativa, para zanjarlos: «¿Que utilizas la expresión «violencia doméstica»? Machista. ¿Que prefieres una Europa de las naciones, más democrática, por oposición a la oligarquía que coarta la soberanía nacional? Eurófobo. ¿Que te opones a la inmigración ilegal? Xenófobo. ¿Que aborreces las prácticas de cambio de sexo que implican mutilación? Tránsfobo».

Referentes de la izquierda

La izquierda ha conseguido deformar la mente, el corazón, la inteligencia y el sentimiento de las personas a través del lenguaje. «El gran logro de las izquierdas ha sido conseguir que sus oponentes piensen y hablen como ellos», expone el autor de Venenosos, que ha estudiado en profundidad a Íñigo Errejón, Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero, Álvaro García Linera, Ernesto Laclau, Chantal Mouffe y demás «camaradas» más para entender las estrategias de la «extrema izquierda».

El politólogo Óscar Rivas, en la redacción de THE OBJECTIVE | Foto: Víctor Ubiña

Esta ha logrado cambiar el «sentido común», utilizando esta palabra del vocabulario de Gramsci. Para este la ideología es una forma de sentido común impuesta por las clases dirigentes, heredada del pasado, arraigada a nuestro modo de vivir y aceptada acríticamente por los ciudadanos. Cambiar el sentido común es, pues, alterar en su raíz la concepción del mundo tradicional, primitiva y elemental.

No pienses en un elefante

Uno de los grandes errores retóricos del centro-derecha, para este experto en comunicación, es que este «se centra en negar lo que no es, o mejor dicho en negar lo que la izquierda dice que es» (radicales, machistas, racistas, etc.). «Al negar ese marco, elaborado por la izquierda, evocan el marco que niegan: el extremismo, el fascismo, la extrema derecha… La fotografía que el otro percibe reside en la afirmación de la realidad que ellos rechazan». Digamos que insisten en que no pensemos en el elefante, pero cuanto más insisten, más inducen a pensar en él.

Una lección que se extrae de Íñigo Errejón («nosotros no nos definimos nunca en torno a quien nos ataca») y que, en opinión del politólogo, han aprendido personajes como Javier Milei, Donald Trump e Isabel Díaz Ayuso, que no han aceptado el tablero impuesto por el rival y han jugado en uno propio, venciendo.

El ejemplo de Milei

De entre estos destaca al dirigente argentino por «la determinación y extrema audacia con la que incurrió en la arena política y la clarividencia con la que supo gestionar el lenguaje en un tablero político marcado por las sistémicas trampas impuestas por décadas por la corrupción ultraizquierdista». «Articulando un relato genuino en contenido y forma, decidió hacer uso de esa agresividad que los montoneros llevaban décadas exhibiendo. Milei no se defendió, atacó golpeándoles donde más les duele», expone el politólogo.

«Maleducada y grosera, la izquierda argentina, de raíces totalitarias y ultra hasta decir basta, no pensaba que nadie en la derecha pudiera hacerle frente e igualara su tono bronco. Entonces Milei le dijo lo que pensaba de ella, lo cual coincidía en realidad con lo que pensaba buena parte del pueblo argentino», alaba Rivas de Milei, en referencia a que el liberal argentino «les definió como lo que son, comunistas, una enfermedad del alma, y les honró con merecidas medallas»

Una batalla por sobrevivir

Por eso insta a la derecha a no hablar de «progresistas»: «¿Que te refieres al grupo? Déjalo en progresía. ¿Que aludes al individuo? Progre. Pero de ningún modo te dirijas a quienes jalean el odio contra ti como progresistas, porque de hacerlo estarás confundiendo a tus públicos, estarás tirando piedras contra tu tejado, pero sobre todo contra la verdad». Para Rivas, el Gobierno de España, y así se ha de nombrar, está formado interna y externamente por «el supremacismo racista catalán, el racismo supremacista vasco, el comunismo y el socialismo».

TO Store
Venenosos: cómo combatir el lenguaje totalitario de las izquierdas
Óscar Rivas
Compra este libro

«El odio a la derecha es el enemigo común, el leitmotiv que explica a todos ellos, el pegamento que posibilita un Gobierno de España contra españoles y, lo que es peor, el motor que articula la construcción de un lenguaje propio para un nuevo régimen que, más allá de lo que exponga su etiqueta, lejos de ser progresista, se muestra profundamente regresivo, antidemocrático y dictatorial», resume Rivas.

La batalla lingüística no es una batalla por la hegemonía de la derecha, sino por la «supervivencia del mundo libre que plutócratas y comunistas, tanto monta, monta tanto, están destruyendo mediante un calculado proceso de deconstrucción». Por eso este libro propone (y forma para) combatir con las palabras. Sin miedo.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D