El Gobierno denuncia que la mitad de las noticias sobre musulmanes son «islamófobas»
El Ministerio de Elma Saiz señala a ‘La Razón’, ‘La Vanguardia’ y EFE por sus contenidos supuestamente «islamófobos»
El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, muy centrado en los «discursos de odio» de un tiempo a esta parte, ha publicado esta semana un informe en el que señala a medios de comunicación concretos por su supuesta «islamofobia». Esta, según el departamento que dirige Elma Saiz, estaría tan extendida que «casi la mitad de los artículos (45,8%) sobre la comunidad musulmana en España y Europa contienen lenguaje islamófobo o son de concepto o mensaje islamófobo». Sobre esta premisa, el Gobierno pide a los periódicos «un esfuerzo» para la «erradicación» de sus prejuicios.
El informe ha costado 14.400 euros, y ha sido elaborado por Pilar Garrido Clemente y Pedro Rojo Pérez. Tras el estudio de 6.279 artículos de «varios medios de prensa escrita, seleccionados con criterios de diversidad ideológica y representatividad», los autores denuncian la «tendencia a asociar al islam con aspectos negativos, particularmente, el terrorismo; la continua percepción del islam como algo extranjero, lo cual conlleva a la perpetuación de estereotipos; la atención constante y frecuentemente negativa que se otorga al uso del velo en las noticias; y la notable ausencia de voces musulmanas en los medios de comunicación».
El semáforo de la islamofobia
Para analizar si un artículo es o no es islamófobo se han tenido en cuenta el titular, las cifras, las imágenes, el lenguaje empleado y las voces que dialogan en él (valorándose positivamente si aparecen entre las fuentes consultadas «representantes de instituciones del Estado, musulmanes comunes, personas racializadas y fuentes musulmanas»). Con arreglo a estos seis indicadores, el informe establece un «semáforo de la islamofobia», que puede ser de alta graduación (rojo) o de una forma más sutil o incluso naturalizada (ámbar).
En estas dos categorías entran el 45,8% de los artículos analizados, lo que supone «una falta de objetividad difícil de imaginar hacia otros colectivos minoritarios», en referencia al colectivo LGTBI. «Con estos contenidos ya hay una conciencia social de que hay textos que son inaceptables y se genera una solidaridad y una presión en redes que sanciona al mundo periodístico por ese tipo de textos. No ocurre lo mismo con los textos islamófobos, que son casi la mitad entre los más de 6.200 artículos analizados en este informe», abunda el Ministerio de Inclusión.
El gabinete de Elma Saiz señala de manera directa a La Razón, La Vanguardia y la agencia EFE. También, aunque en menor medida, a El Mundo, cuyos artículos sobre el mundo árabe serían «islamófobos» en el 52,8% de los casos. «Se trata de un fenómeno sistémico y profundamente asentado no solo en las redacciones, sino en la sociedad en su conjunto, que normaliza los textos agresivos o discriminatorios contra las personas musulmanas», asevera el informe, que, por otro lado, loa la labor de eldiario.es: «Evidencia que es posible escribir sobre la comunidad musulmana sin caer en el racismo antimusulmán».
El estudio, que toma artículos escritos entre 2017 y 2021, asegura que ha habido una mejora generalizada. Así, señala que «en el 2017, además de confirmar que la islamofobia en la prensa española era un tema acuciante, se registraron varios datos llamativos como que El País se situase cerca del 70% en cuanto a artículos islamófobos». La cabecera de Prisa los redujo a un 41,8% en 2021, mientras que el único diario que los habría aumentado en este lustro sería El Mundo.
Otro dato que resalta el informe es la valoración de los artículos según el tono. Cuando el artículo se refiere a un tema positivo, lo que ocurre solo en el 25,7% del total de casos analizados, estos estarían más libres de islamofobia (79,5%), mientras que cuando el tema es negativo (74,3% del total de casos) más de la mitad de los artículos (54,6% en la suma del rojo y el ámbar) incurrirían en ella.
Consejos y consignas
Por último, el Ministerio de Inclusión se permite dar una serie de recomendaciones a los medios de comunicación que quieran mejorar su puntuación en lo sucesivo, instándoles a «un esfuerzo» para la «erradicación» de la «islamofobia» con una batería de consignas entre las que destaca «dar voz a la diversidad de mujeres musulmanas»: «Hay que evitar generalizar experiencias negativas de mujeres concretas, como si fuera la realidad de todas las mujeres musulmanas».
«La mujer musulmana es representada principalmente en relación con su identidad religiosa y el hiyab, desde una perspectiva peyorativa, dando por hecho que no tiene independencia para tomar sus propias decisiones. Esta representación limitada contribuye a una visión estrecha y estigmatizada de las mujeres musulmanas, aunque ha habido también algunos avances al presentar puntualmente realidades más positivas y diversas», dice el informe.
El gabinete de Elma Saiz también consigna como «imprescindible tender puentes de confianza entre periodistas y comunidad musulmana que pasan por un ejercicio periodístico respetuoso y fiel a las palabras de las personas que son inquiridas por los medios, que deberían ser diversas como lo es la ciudadanía de confesión musulmana en España».